La Fundación Solventia y el Museo Nacional de Ciencias Naturales han decidido fomentar la vocación científica de los jóvenes de entre 12 y 18 años, residentes en España cualquiera que sea su nacionalidad, que tengan capacidad de observación, curiosidad y talento artístico, mediante la creación del I Concurso de Fotografía Alfredo Truan sobre Ciencia y Naturaleza.
La primera edición del certamen, para el curso 2008-2009, tendrá como tema principal Agua y Vida al ser éste el elemento fundamental para la conservación de la biodiversidad. El certamen quiere incentivar a los jóvenes a que capturen imágenes en las que se ensalce la necesidad de proteger el agua, como elemento indispensable para que haya vida en el planeta.
También se ve valorará especialmente la aplicación de métodos innovadores que desarrollen el talento artístico, la creatividad y la capacidad de observación de los concursantes, como consecuencia de la aplicación de la tecnología a la ciencia.
Para facilitar esta creatividad y este espíritu innovador, la técnica para la realización y la presentación de las obras será libre.
Los participantes se dividirán por edades en dos categorías de 12 a 15 y de 16 a 18 años. El certamen concederá dos premios por cada categoría, el primero dotado con 1.500 € y seleccionado por un jurado de expertos en ciencia y fotografía y el segundo de 800 € elegido por votación popular on-line.
El plazo para la presentación de los trabajos fotográficos estará abierto del 1 de diciembre de 2008 al 1 de marzo de 2009, periodo después del cual las obras serán valoradas por un jurado de expertos. Las 25 obras finalistas serán expuestas en el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid y se colgarán en la web de la Fundación Solventia para que puedan ser votadas por el público.
Alfredo Truan Luard
El I Concurso de Fotografía sobre ciencia y naturaleza constituye un homenaje al industrial vidriero suizo Alfredo Truan Luard (1835-1890) quien residió buena parte de su vida en Asturias donde desarrolló, además, una interesante carrera como fotógrafo e investigador científico.
Las cualidades innatas de buen observador que poseía Alfredo Truan Luard, le impulsaron a desarrollar una destacada actividad en el campo de las ciencias naturales. Su conocimiento en una avanzada técnica basada en la fotografía aplicada al microscopio, conocida entonces como fotomicrografía, hizo posible que reprodujera en litografías las diatomeas, algas microscópicas unicelulares que pueblan en elevado número los ríos y los mares. Las imágenes de estas algas, invisibles al ojo humano, al estar recubiertas de sílice presentan unas admirables y bellísimas formas geométricas.
Así a finales del siglo XIX, las labores de Alfredo Truan Luard contribuyeron decisivamente a dar una proyección internacional al estudio de la Diatomología ya que, al aplicarse la fotografía como medio de reproducción gráfica para el estudio de los organismos microscópicos, se abrió una amplia posibilidad de difusión en el conocimiento de las colecciones existentes, a la vez que empezaron a utilizarse técnicas diversas para mejorar las condiciones de observación. Algunos de los ejemplares de las imágenes captadas por Truan Luard se hallan expuestos en el Museo de Historia Natural de Londres.
Además, la trayectoria de Alfredo Truan Luard mantiene una vinculación histórica con el Museo Nacional de Ciencias Naturales al haber donado una relevante colección de frascos de vidrio, de gran calidad por su bajo contenido en plomo, que todavía hoy albergan una de las mas importantes colecciones de malacología del Museo.
La Fundación Solventia y el Museo Nacional de Ciencias Naturales
La Fundación Solventia es una organización privada sin ánimo de lucro, fundada por Conrado Truan que se constituye con la finalidad principal de realizar tareas benéficas, educativas y de promoción cultural. Vinculada al despacho de abogados Díaz-Bastién & Truan, sus actividades están dirigidas a la formación de la infancia y la juventud, y a la atención de las necesidades y carencias existentes en el ámbito educacional, contribuyendo de esta manera a un mejor desarrollo de la sociedad.
El Museo Nacional de Ciencias Naturales ha creado, en colaboración con La Fundación Solventia y la familia Díaz-Bastien, un Jardín Educativo sobre el Bosque Mediterráneo especialmente destinado a niños y jóvenes, con el objetivo de que puedan conocer la diversidad vegetal y la geología del terreno de la Comunidad de Madrid.