Siempre bajo el paraguas de la innovación social, en este blog hablamos con mucha frecuencia, además de tocar otros temas, tanto de tecnología, como de medioambiente y de sostenibilidad.
Al contrario de lo que mucha gente cree, estos conceptos, estás áreas de conocimiento, no tienen por qué ser contrapuestos, sino que muchas veces la tecnología nos puede ayudar a hacer un mundo mucho más habitable en todos los sentidos. Sirva como pequeño ejemplo PowerTrekk, un invento desarrollado por la empresa sueca myFC, que hemos encontrado en el fantástico blog La Brújula verde.
El invento nos parece sumamente ingenioso, pero hay que aclarar que no es únicamente el agua lo que desencadena la reacción que genera vapor de agua para tener electricidad. Hay pilas de combustible que inician el proceso con el Hidrógeno en estado gaseoso. En el caso de PowerTrekk, lo que tenemos son unos pequeños discos con siliciuro de sodio que al tomar contacto con el agua reaccionan generando el Hidrógeno y desprendiendo calor. El Hidrógeno alimenta la pila de combustible, y nosotros obtenemos electricidad como para recargar un teléfono móvil dos veces. El residuo, los discos, se reciclan de forma sencilla.
Cuando la reacción da comienzo, ya no se puede parar, y por decirlo de forma coloquial, el disco se consume. Pero, la energía sobrante tras recargar nuestro gadget no se pierde, sino que queda acumulada para la siguiente recarga. El modelo de negocio de myFC, ya lo habrán intuido todos los lectores, es la venta de los discos de siliciuro. La utilidad del invento, es obvia: poder llevarse tranquilamente el móvil, u otros dispositivos, a un lugar sin acceso a la red eléctrica, y no quedarnos incomunicados.