“Sana-sana” es un programa de Infancia Solidaria que ha logrado que 200 niños de distintos países en vías de desarrollo y con pocos recursos hayan sido operados en España de sus patologías y hayan podido regresar a su país como niños sanos. El 9 de septiembre, celebramos sus 10 magníficos años de trabajo por la salud de los niños en nuestro centro, La Casa Encendida.
El artículo 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 menciona a la salud como parte del derecho a un nivel de vida adecuado, sin embargo, la asistencia sanitaria universal continúa siendo una tarea pendiente en muchos lugares. Ante esta situación, Infancia Solidaria lleva más de 10 años trabajando para que los niños a los que se les niega este derecho -ya sea por su tipo de enfermedad, problemas económicos o carencia de infraestructuras- tengan una alternativa. Desde que se inició el programa “Sana-Sana”, pequeños de El Salvador, Ecuador, Nicaragua, Guinea Bissau, Kenia, Etiopía y Senegal han pasado por España para ser operados aquí al no poder ser atendidos en su país de origen.
Desde que se detecta un caso de un niño que necesita ayuda hasta que regresa sano a su país, se suceden diferentes etapas. En primer lugar, las familias de los propios niños afectados, cooperantes, doctores y otras ONGs envían las peticiones a Infancia Solidaria que estudia cada caso para asegurarse la viabilidad de la operación u operaciones. Pasado este primer proceso, se solicita la autorización a las Consejerías de Salud de las respectivas Comunidades Autónomas, que actúan con cargo al presupuesto de Cooperación al Desarrollo; no sanitario, así como a hospitales privados con programas humanitarios. Centro sanitarios de Andalucía, Cataluña, Aragón, Madrid y Valencia ya se han sumado a lo largo de estos años a poner su granito de arena, asumiendo todos los costes sanitarios que suponen las intervenciones quirúrgicas: personal, instalaciones, medicación y tiempo.
Familias que acogen
Conseguidos los permisos y el compromiso de los hospitales, llega una segunda fase en la que toca trasladar al pequeño a España y hacer que su estancia sea lo más agradable posible. Infancia Solidaria se ocupa de todos los trámites burocráticos y logísticos, además financia los viajes y los costes extra hospitalarios. Es entonces cuando los voluntarios de la ONG –que no tiene personal remunerado- comienzan la búsqueda de una familia de acogida para los niños que van a ser operados y que, generalmente, viajan con sus madres. Las familias de acogida proporcionan alojamiento, manutención y apoyo a los beneficiarios con la ayuda de otros voluntarios que acompañan a los niños durante sus ingresos hospitalarios. Además, normalizan la situación extraordinaria a las que se enfrentan los niños, facilitando la comodidad de su estancia con el calor de una familia.
El programa que hasta el momento ha permitido mejorar las vidas de 200 niños se sustenta sobre una cadena humana en la que médicos, socios colaboradores, familias y voluntarios echan una mano de forma altruista. “Todo el mérito es del equipo. Un maravilloso grupo de gente buena”, dice Pepo Díaz, fundador y presidente de Infancia Solidaria.
La ONG lleva también a cabo otros programas solidarios, como “ISA House” donde se realiza acogimiento temporal de niños enfermos y acogimiento de niñas de la calle en colaboración de la ONG Abay y “Cuéntame un sueño”, que trata de hacer realidad los sueños de niños enfermos residentes en España intentando que puedan hacer realidad el sueño que deseen (conocer a alguien que admiran, montar a caballo, acudir a un evento deportivo o musical, etc.).
De todas sus iniciativas, de todo este trabajo por la salud infantil hablaremos el próximo 9 de septiembre en nuestro centro La Casa Encendida, donde disfrutaremos de un bonito espectáculo de magia para niños en compañía de amigos, colaboradores y todo el que lo desee, que podrá sumarse a la celebración del X cumpleaños de la ONG (hasta completar aforo).
¡Te esperamos!