En Japón la esperanza de vida es la más alta del mundo con 82 años, mientras que en países como Zimbabue la disminución ha sido escandalosa porque ahora el promedio de vida es de 36 años y no de 54 años como era hace una década. La razón, más enfermedades como VIH/Sida, Tuberculosis y vectores que aumentan producto del cambio climático mermando la salud de las poblaciones.
Así lo da a conocer un informe titulado: La salud en la cooperación al desarrollo y la acción humanitaria, elaborado por las ONG Médicos del Mundo, Medicus Mundi y Prosalus, que aboga por el mantenimiento de los compromisos asumidos internacionalmente y la coordinación de iniciativas bajo el liderazgo de la Organización Mundial de la Salud.
Según el informe el sector salud en la cooperación española a pesar de haber recibido cinco millones de euros más de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), ha perdido peso relativo pasando de 8,55 % al 7,95% de acuerdo a los datos de la Agencia Española de Cooperación al Desarrollo (AECID).
Y es que la ayuda se canaliza a través de organismos internacionales como el Fondo Global contra Sida, Malaria y Tuberculosis– primer receptor de la ayuda multilateral en salud, con un total del 85,25%.- este hecho es sorprendente puesto que se trata de iniciativas que, aunque realizan actuaciones destacables, trabajan contra problemas concretos olvidando otras necesidades sanitarias de la población.
Por otra parte, la ayuda reembolsable – préstamos flexibles- en el sector salud se multiplica casi por cinco, una práctica calificada por las ONG como “inaceptable”, puesto que la utilización de este tipo de ayuda conlleva el endeudamiento de los países poniendo en riesgo el acceso al sistema sanitario.
En una época de crisis económica como la actual, es necesario que los compromisos se mantengan. La reciente aprobación del Plan Director de la Cooperación Española 2009-2012 abre nuevos retos en este sentido.
Para Prosalus, Medicus Mundi y Médicos del Mundo, este Plan debería ser el de la consecución del 0,7%, y además un 0,7% que esté orientado a resultados y a una mejora real de la salud de las poblaciones más pobres”.
Además, las tres organizaciones consideran que la Unión Europea, como primer donante mundial, debería pasar de las palabras a los hechos, ya que por primera vez en 10 años, disminuyó en 2007 un porcentaje lo destinado a cooperación y en el ámbito de salud, carece de una estrategia definida que concrete las prioridades en este ámbito.
A nivel internacional, la acción humanitaria ha adquirido un carácter propio dentro de la cooperación. En España, el presupuesto destinado a este tipo de acciones ha descendido un 4,4% con respecto a 2006, pasando de 248 millones de euros a 237.
El gran reto para la cooperación Española es la elaboración de un plan de acción que lleve a la práctica el compromiso firmado en 2004 con los Principios de Acción Humanitaria de los donantes.