
En nuestras ciudades cada vez se hace más visible la presencia de personas mayores, un colectivo de población que a veces no puede realizar una vida del todo autónoma, porque los espacios donde viven no son del todo accesibles.
Pero en poco tiempo, las personas mayores residentes en Donostia podrán integrarse más fácilmente en su entorno gracias a una nueva iniciativa que ya está vigente en 35 ciudades de 22 países. Se trata de la aspiración de San Sebastián a ser la primera ciudad española que se incluya dentro de la Red Mundial de Ciudades Amigables con las Personas Mayores, un proyecto que está impulsado por la Fundación Matia, por el ayuntamiento de la capital guipuzcoana y por el Plan Estratégico de la ciudad. La iniciativa, además, está promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con este proyecto se pretende lograr que las personas mayores que residan en este municipio puedan tener un mejor acceso a la cultura, al deporte, al transporte, a la vivienda y, en definitiva, a todos los ámbitos por los que transitan en su vida cotidiana para que tengan una mejor calidad de vida.
Una decena de grupos de entre 8 o 10 personas se encargarán de determinar cómo es de accesible la capital guipuzcoana. Por ejemplo, se evaluarán aquellos pisos en los que se pueda subir en ascensor, autobuses que no tengan escaleras, letreros que se puedan leer o calles libres de obstáculos.
Se trata de un proyecto que el ayuntamiento donostiarra quiere aprovechar como uno de los ejes de la candidatura a la capitalidad cultural europea del 2016. Además, supone un factor muy positivo para que uno de los grupos de población más vulnerables pueda llevar a cabo un “envejecimiento activo” que les permita tener un protagonismo creciente en la vida cultural y de ocio de la ciudad, gracias a un mejor acceso de espacios urbanos y de equipamientos que, a la larga, también contribuirá a que jóvenes, adultos y niños gozen, como las personas mayores, de una mejor calidad de vida.