Cada vez más jóvenes de Camerún optan por permanecer en las zonas rurales para emprender actividades productivas basadas en la agricultura, debido a las tasas de desempleo en las ciudades.
Por este motivo, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), perteneciente a la ONU, concederá 13,5 millones de dólares (9,93 millones de euros) y un préstamo de 0,2 millones de dólares (0,15 millones de euros) a los pequeños agricultores y a los jóvenes de Camerún. De esta forma, se reduce la pobreza, aumentan los ingresos y mejoran los medios de subsistencia de las personas en las zonas rurales.
La mayoría de estos jóvenes se enfrentan a dificultades en el acceso a servicios financieros adaptados a sus necesidades, de ahí este proyecto de financiación de las áreas rurales.
Con este apoyo por parte del FIDA, el empleo rural aumentará y a su vez se producirá un incremento de los ingresos de los pobres del campo y mejorará su seguridad alimentaria y la situación de las mujeres, que participarán en la gestión de las instituciones de microfinanciación.