Como ya conocéis, la energía solar térmica es una opción bastante nueva que ofrece una oportunidad a los países más soleados comparable al avance que los parques eólicos marinos están ofreciendo a los países europeos con más viento en costas y mares.
Pero es que además es el futuro: según un informe denominado ‘Energía Solar Térmica de Concentración: Perspectiva mundial 2009‘, que ha sido elaborado por GreenPeace, junto con la Asociación Europea de la Energía Solar Termoeléctrica (ESTELA) y el programa Solar PACES de la Agencia Internacional de la Energía, la energía solar térmica de concentración (ESTC) podría satisfacer el 7% de la demanda eléctrica mundial en 2030 y más de la cuarta parte en 2050.
Esta tecnología es muy importante para luchar contra el cambio climático. Su uso favorecería que se redujeran 4700 millones de toneladas de CO2 al año para 2050, una cifra realmente a considerar.
Para los que no lo sabían, las centrales solares termoeléctricas pueden funcionar sin necesidad de que haya sol, almacenando la energía en forma de calor u operando junto con otras energías renovables.
España es uno de los países más destacados en la producción de esta energía y en los últimos años se han creado centrales más eficientes que podrían ser una opción a las centrales térmicas o nucleares,ya que proporcionan una cantidad de electricidad equivalente a la producida por estas últimas y pueden construirse en meses.