Las grullas en Gallocanta

Grullas junto a la laguna de Gallocanta. ©Andoni CanelaEste otoño he vuelto a la laguna de Gallocanta a ver a las grullas como hice por primera vez hace así 20 años. Observo a cientos de ellas que caminan de forma acompasada y majestuosa sobre sus largas patas en este enclave que está a 1.000 m sobre el nivel del mar. En esta laguna salobre al sur de los Pirineos, situada en un entorno semiárido, buscan refugio cada año miles de ejemplares de grullas (Grus grus) que llegan del norte. Se trata de uno de los mejores observatorios ornitológicos de toda Europa. En los campos cercanos es posible verlas comiendo cereales durante el día pero resultan espectaculares al alba y en el crepúsculo cuando sus sonidos ensordecedores llenan el aire.