Beatriz Mejía Roberto es una mujer emprendedora, de 41 años y procedente de la República Dominicana, que acaba de conseguir su integración laboral como camarera de pisos gracias al proyecto ‘Dácil La Palma’ de Cáritas Tenerife.
Su objetivo es terminar un curso de Técnico de Turismo que ha empezado y seguir aprendiendo inglés para acceder a un puesto aún mejor. Esta mujer ha llegado a conocerse a sí misma, a valorarse cada vez más, gracias a esta iniciativa, y pretende seguir hacia delante sin miedo a nada porque, como afirma, la vida es un regalo.
Eres una de las once mujeres afortunadas que ha conseguido trabajo gracias al proyecto ‘Dácil La Palma’ de Cáritas Tenerife. Cuéntanos tu experiencia…
Gracias a la representante de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Mazo he conseguido convertirme en camarera de pisos, un trabajo que consiste en limpiar las habitaciones de los hoteles. Estoy contenta porque estoy activa, tratando con diferentes personas, haciendo amigos y esta profesión aporta a mi vida libertad e independencia económica.
¿En qué ha consistido el proceso desde que te aceptan en este proyecto hasta que encuentras un trabajo?
La primera parte es formal: datos personales, currículo y una entrevista con la representante del proyecto aquí en La Palma (isla adscrita a la provincia de Santa Cruz de Tenerife dentro del Archipiélago canario). Luego me llamaron para decirme que había sido aceptada.
¿Podrías explicarnos en qué consiste ‘Dácil La Palma’ y cómo has vivido la experiencia?
‘Dácil La Palma’ es un proyecto educativo y social, de inserción en la vida laboral, que nos enseña a ser nosotras mismas, a no tener miedo, a conocernos, a integrarnos en la sociedad. También a poner tarjeta roja al maltratador, a disciplinarnos, a elegir nuestras prioridades. He vivido la experiencia intensamente emocionada. Cada día que asistía a clase o a cualquier actividad era maravilloso y me dio la oportunidad de conocer a muchas personas, mujeres maravillosas.
El perfil de las mujeres que han participado en este programa es el de una mujer canaria o inmigrante, con formación académica media-alta, con escasos recursos económicos y apoyos sociales, y con alto índice de maltrato psicológico. ¿Podrías contarnos un poco tu historia personal y por qué has necesitado el apoyo de este programa?
Mi perfil es el de mujer inmigrante, con formación académica media, con escasos recursos económicos y apoyos sociales. Llegué a este país casada con un canario de La Palma, vine por amor. Mi marido perdió el trabajo que tenía mientras yo intentaba venir aquí. Soy de Republica Dominicana, de Colon. Dejé a mi familia a los cuales extrañaba mucho y aún sigo extrañando. Al principio, lo más difícil para mí fue salir a la calle, fueron días difíciles, pues sentía que me veían y me miraban de una forma extraña.
Entonces, cuando llegaste a España ni tú ni tu marido teníais trabajo…
Ninguno y era una situación difícil. No entendía porqué mucha gente en algunos lugares me rechazaba por mi color o por ser diferente, era algo que nunca había vivido. Pero gracias a este proyecto, que me enseñó a sentirme bien tal y como soy y conocer otras mujeres con problemas graves, comencé a sentirme afortunada. Hoy camino por las calles y no me da miedo que me miren o que hagan algún comentario, yo se quien soy gracias al proyecto ‘Dácil La Palma’.
¿Qué ha significado para ti la inserción laboral y la participación en ‘Dácil La Palma’?
Ha significado una vida nueva, ver las cosas desde otro punto de vista, una mejor calidad de vida no sólo en lo económico, por poder estar trabajando hoy día, sino también en lo personal.
¿Qué les dirías a todas las personas que han hecho posible tu inserción social y laboral?
No tengo palabras para agradecer su atención, su cariño y su preocupación, no sólo por mí sino por todas las mujeres que participamos en este proyecto. Les doy las gracias desde el alma y les animo a que sigan cambiando personas, ya que proyectos como éste dan vida y esperanza.
¿Qué consejo les darías a otras mujeres que estén en tu antigua situación?
Que participen, que hagan amigos, que crean en ellas mismas, que tienen cualidades que ni se imaginan.