Una vez soñé que el mundo de la publicidad, con sus frases y su lenguaje incisivo, apelante a las incontrolables emociones, podría ayudar a despertar consciencias si se empeñaban en lanzar mensajes positivos que se grabaran en nuestras mentes como nuevas creencias que rectificaran comportamientos, pensamientos dañinos y enderezaran nuestros caminos y, por ende, el futuro del planeta.
No sé si es ese deseo, aún presente en mi existencia, lo que aún me hace fijarme, precisamente, en esas frases positivas que logran tocarme la fibra, en ese lenguaje que comienza a dejar de ser un chantaje emocional, que nos partía el corazón, para convertirse en una invitación a aunar esfuerzos y hacer que este mundo sea mejor.
Y esto a cuento del último vídeo institucional de la ONG ‘Acción contra el Hambre’ que, escudriñado el texto, me ha hecho recapacitar y tomar conciencia de que, efectivamente, esos mensajes típicos que antes parecían apuntar siempre al sentimiento de culpa por considerarnos en una situación privilegiada respecto al otro, hoy consigue despertar la solidaridad, el compromiso y la conciencia desde la necesidad individual de contribuir a devolver a la vida, al mundo, lo que ella misma nos da.
Y me gusta que sea así, que se apele a nuestros mejores valores, que nos inspiren y nos informen de la realidad y nos expliquen cómo podemos colaborar en ese empeño y en esa misión de conseguir un mundo sin hambre porque tal y como afirman con rotundidad desde la ONG humanitaria:
El hambre tiene solución
Y es que si nuestro mundo produce suficientes alimentos para todos, ¿cómo es posible que mil millones de personas pasan hambre y que cada día 7.000 niños mueran cada día? Bien, los datos son los que son, pero lo bueno de esta ONG es que ofrece soluciones y que éstas pasan por garantizar el agua, el primer alimento, reforzar la producción de alimentos, ayudar a los pequeños agricultores a que los vendan en el mercado y a que puedan comprarlos. Amén de prevenir y tratar la desnutrición.
Y sus cifras no mienten. ‘Acción contra el Hambre’ tiene 5.000 “visagras” o cooperantes que hacen que la ayuda que les ofrecemos llegue a 7,5 millones de personas de 45 países. Esto es importante. Y aún más, dan a los más desfavorecidos y promueven cambios políticos. Ellos creen que un mundo mejor es posible y que con la colaboración de personas como tú y yo, y redundo adrede en la siguiente frase, “el hambre sí tiene solución”.
Repleto de originalidad, color, sombras chinescas, esencialidad y exento de dramatismo, pero señalando las carencias y las soluciones, te dejo con el breve y nuevo vídeo institucional de la ONG humanitaria. Toda una obra poética: