Un estudio longitudinal podría descifrar factores para prevenir enfermedades neurodegenerativas

Personas mayores en residencia
Foto: Fundación CIEN

Según una proyección de crecimiento realizada por EUROSTAT, la población mayor de 80 años pasará de representar el 1,2% en 1950 al 11,8% en 2050. Este envejecimiento progresivo de la población hace que cada vez sean más frecuentes los estudios por parte de la comunidad científica encaminados a mejorar las condiciones de vida las personas mayores como, por ejemplo, el proyecto C.Madrid+CIEN.

Este proyecto está desarrollado por la Fundación Centro de Investigación de Enfermedades Neurológicas (CIEN) en colaboración con la Consejería de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid y la Universidad Europea de Madrid, y dirigido por María Ascensión Zea, neuróloga de la Unidad de Investigación Proyecto Alzheimer de la Fundación CIEN y Alberto Rábano, director del Banco de Tejidos BT-CIEN.

Su objetivo es conocer mejor el perfil biopsicosocial y las características clínicas de las personas centenarias mediante un programa anual de seguimiento longitudinal a mayores de 90 años sin demencia durante entre tres y cinco años. A lo largo de este tiempo se realizarían evaluaciones clínicas y neuropsicológicas, toma de sangre o mucosa de la cavidad bucal como muestras biológicas e incluso, en el caso de que los participantes sean donantes del Banco de Tejidos BT-CIEN.

Asimismo,  también se definiría su perfil cognitivo y se les aplicaría un programa de ejercicio específico para verificar su posible efecto beneficioso y, en ese caso, mejorar su calidad de vida.

Con todo ello se trataría de descifrar de forma más fácil qué combinación de factores permiten prevenir enfermedades neurodegenerativas como la demencia y, de forma más concreta, la demencia tipo Alzheimer ya que es difícil definir los criterios de normalidad cognitiva y neuropatológica en personas mayores de 90 años.

C.Madrid+CIEN complementaría así el Proyecto Vallecas que se realiza en la Fundación CIEN con la colaboración de la Fundación Reina Sofía, ya que en este participan voluntarios de entre 70 y 85 años y tiene por objetivo identificar la mejor combinación de marcadores para el diagnóstico precoz de la enfermedad.