Los sensores protegen Doñana

Imagen de la web del Ministerio de Medio Ambiente
Imagen de la web del Ministerio de Medio Ambiente

La posibilidad de estar sin que nos vean, ver sin que nos oigan y estudiar lo que antes resultaba imposible, llega a Doñana de la mano de 300 sensores. Su instalación en el Parque Nacional contribuye al conocimiento y atención de nuestro ecosistema, a la mejora, en definitiva, del medio ambiente.

Los trescientos sensores de la multinacional española Satec vigilarán la reserva biológica de Doñana y captarán datos sobre el metabolismo de plantas, suelos y animales, sobre meteorología y la calidad de sus aguas.

El «Proyecto Doñana» de Satec, pionero en el mundo, permitirá también poner esta información a disposición de los ciudadanos y la comunidad científica a través de su web, «www.satec.es».

Las 300 sondas, caudalímetros, radares y cámaras de vídeo de la compañía que velan por la protección del parque utilizan tecnologías limpias y renovables, que aprovechan la energía solar.

Las estaciones base del sistema recogerán información para estudiar el medio y detectar posibles situaciones de alarma. Entre otros aspectos, facilitará el seguimiento meteorológico (temperatura, humedad relativa, presión atmosférica, dirección del viento), analizará la calidad del aire (CO2, radiación, flujos), y hará un seguimiento de la flora y de la fauna (hábitos de comportamiento, análisis mediante audio).

En algunos casos cuenta con instalaciones móviles autónomas que observan las 24 horas del día, como el del lince ibérico.