La resistencia de las neuronas

Al parecer una de las principales características de las enfermedades neurodegenerativas es que las neuronas se deterioran progresivamente hasta que mueren. Los últimos datos aportados por un estudio británico apuntan a que, en el caso del Alzheimer, parece que sobreviven meses e incluso años al deterioro generado por la enfermedad.

Investigadores del Instituto Babraham (Reino Unido), en colaboración con Alzheimer’s Research Trust y el Biotechnology and Biological Sciences Research Council (BBSRC), han descubierto que el circuito cerebral sobrevive más tiempo del que se creía en enfermedades asociadas a la vejez, como el Alzheimer.

Todavía se sabe poco acerca de cómo mueren las células nerviosas, aunque esta nueva investigación, publicada en la revista ‘Brain’, revela que primero pierden su habilidad para comunicarse entre ellas y luego comienzan un proceso de deterioro más profundo.

El doctor Michael Coleman, responsable del proyecto, comparó las circunstancias a lo difícil que resulta trabajar con un ordenador sin conexión a Internet por banda ancha:

«Ocurre lo mismo en las neuronas del cerebro cuya conexión eléctrica se ha perdido o dañado. Una vez que las vías de comunicación se estropean, las neuronas nunca volverán a trabajar para aprender y memorizar, porque no se regeneran»

No obstante, el cerebro no contiene cables sino las ‘autovías’ más pequeñas del mundo, un sistema de transporte en miniatura que con el envejecimiento empeora, aunque existen conexiones que deben sobrevivir y funcionar durante toda la vida.

El Alzheimer interrumpe el transporte, pero parece que no totalmente, pues una cantidad suficiente de material consigue llegar a través de estos espacios y mantener algunas neuronas vivas al menos varios meses, incluso años. Esto demuestra que las partes básicas de las neuronas se mantienen vivas y entonces es posible estudiar cómo intervenir para recuperar las conexiones.