Menos presas y más ríos

La organización conservacionista WWF ha pedido que se desmantelen 20 presas españolas que están «obsoletas, en ruinas» o causan «graves» impactos medioambientales sobre espacios naturales protegidos.

Pero digamos que esta petición supondría un simple «pistoletazo de salida» porque según esta entidad, son casi un centenar las infraestructuras de este tipo las que habría que derribar.

Y es que esta organización, en el marco de su nueva campaña «Liberando ríos«, ha analizado 1.231 grandes presas y como dice su secretario general, Juan Carlos del Olmo, otros 7.000 «pequeños obstáculos» (diques y azudes) existentes en España, «el país con más presas per capita del mundo» (en el conjunto del planeta existen actualmente 45.000 presas). Pincha aquí para ver el mapa interactivo de presas.

¿Pero por qué deshacerse de ellas? Sus principales usos son almacenar agua para regar cultivos, producir energía hidroeléctrica y abastecer a poblaciones. Pero según WWF, el 46% de las que han investigado (568) se encuentran en espacios de interés ecológico, y un 25% (308) tiene más de 50 años «y debe contemplarse su caducidad».

Aunque del Olmo considera que algunas son «útiles», alerta de que alteran la calidad del agua, interrumpen las vías de movimiento natural de la fauna y la flora y modifican el régimen de caudal de cada río. Por otra parte, afirma que su demolición aumentaría la concentración de oxígeno disuelto en las aguas y la diversidad biológica del sistema, entre otras cuestiones.

El secretario general de esta ONG ha remitido además una carta a la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, a los presidentes de las conferencias hidrográficas y a los de las comunidades autónomas afectadas para que «consideren la oportunidad que supone la demolición de presas en España» que, además, «supondría una gran fuente de empleo» en el marco de la «economía verde» que quiere impulsar el presidente del Gobierno.

«El río es una especie en extinción en España. El Tajo no existe, no es más que una cadena de embalses y, del Ebro, olvidémonos», concluyó este experto.