El río de la Plata ‘brilla’ cada vez menos

Foto del río de la PlataConsiderado como el tercer río más contaminado del mundo, después del Salween (Asia) y del Danubio (Europa), el Río de la Plata, ubicado entre Argentina y Uruguay, ‘brilla’ cada vez menos debido al vertido en sus aguas de residuos agroquímicos, de basura doméstica, del diésel de las embarcaciones e, incluso, del drenaje de los pueblos asentados en sus orillas.

Este estuario, que sirve de límite natural fronterizo entre Uruguay y Argentina y que desemboca en el Océano Atlántico, es formado por la unión de los ríos Uruguay y Paraná (éste último con nacimiento entre los estados brasileños de São Paulo, Minas Gerais y Mato Grosso del Sur). Precisamente es en el país de la samba donde empieza parte del problema.

La tala indiscriminada que se lleva a cabo en la zona para ganar tierras de cultivo, no sólo ha disminuido el acuífero de los afluentes del río de la Plata, sino sobre todo ha introducido el uso de pesticidas que, por las filtraciones y las desembocaduras de aguas de riego, terminan en el gran estuario.

A esto se le suma el vertido de residuos industriales y domiciliarios en sus afluentes y riberas. Es conocido que muchos pueblos argentinos y uruguayos arrojan sus drenajes en el Río de la Plata.

Esta situación no sólo pone en riesgo la vida de las poblaciones aledañas, sino también de la flora y fauna del río binacional. Una de las especies únicas que alberga el estuario es el Delfín Franciscana, que vive en aguas salobres y que cada vez se encuentra más amenazado.

Por si fuera poco la presencia de una planta de celulosa en la ciudad uruguaya de Fray Bentos, la cual provee de papel al mercado europeo, empeora la situación. La instalación de la factoría, de capital finlandés, ha generado un enfrentamiento entre Argentina y Uruguay en la Corte de la Haya, debido a la evidente contaminación que produce. Un litigio que aún se encuentra pendiente de resolución.