Fijar la atención en la actividad de las aves de Monfragüe, me lleva a localizar un nido de buitre negro sobre una encina situada a más de medio kilómetro de distancia. Sobre el río Tajo, que cruza el Parque longitudinalmente, distingo también la cigüeña negra. Algunas parejas de esta ave ya están ocupadas en el cuidado de sus polluelos recién nacidos; otras, en cambio, todavía están construyendo su nido. Precisamente, en este Parque Nacional (declarado como tal en 2007 y que también incluye otras figuras de protección como las Zonas de Especial Protección para las Aves) se hallan las principales concentraciones europeas de estas dos especies aves. Un hecho relevante si tenemos en cuenta que la cigüeña negra, igual que el águila imperial o el lince ibérico, también presentes aquí, se encuentra en peligro de extinción.