La nutrición y nuestros mayores

Persona mayor activa que goza de buena saludUna dieta equilibrada es fundamental para una vejez activa, sana y satisfactoria. Así al menos lo ha afirmado Joaquín Martínez, secretario autonómico de Autonomía Personal y Dependencia de la Consejería de Bienestar Social de la Comunidad Valenciana.

Y es que resulta que alrededor del 35% de las personas mayores de 65 años padece trastornos nutricionales. Este es un dato especialmente alarmante y por ello la Consejería mencionada está trabajando en el impulso necesario de iniciativas que planten cara a este problema.

Porque si lo que dicen en la ‘II Jornada de Actualización en Nutrición para Centros Sociosanitarios’ es verdad, todos los datos que se hicieron públicos allí, tendríamos que concienciarnos para alentar a nuestros mayores e incluso supervisar sus dietas porque no pueden perder la alegría de cuidarse y vivir los años que les quedan, los mejores, sin tenerse en cuenta, sin preocuparse o cayendo en una desidia o apatía que, como vemos ahora, les puede provocar un trastorno alimenticio.

En su intervención, el secretario autonómico señaló que una de las necesidades básicas para fomentar un envejecimiento satisfactorio “estriba en la promoción de la salud y en la prevención de las enfermedades” y, en este sentido, ha destacado que la alimentación (lo he dicho más arriba, pero vuelvo a insistir):

“juega un papel fundamental porque una dieta equilibrada y apropiada favorece una vejez sana, activa y satisfactoria”.

En este sentido, no podemos olvidar que cada vez está más aceptada la relación entre la alimentación y el estado de salud de las personas. De hecho, las patologías más frecuentes relacionadas con la vejez se pueden prevenir mediante un diagnóstico precoz, combatiendo los factores de riesgo y promocionando estilos de vida saludables, como realizar ejercicio físico de forma regular o llevar una dieta equilibrada.

Y observemos otros dados que esta vez son aportados por el Instituto Nacional de Estadística: un 44% de las personas mayores tiene sobrepeso y un 23% es obesa. Además, el 18% de las personas mayores de 65 años padece diabetes, porcentaje que aumenta hasta un 40% en los mayores de 80 años. Y, por otro lado, un 23,5% padece colesterol.

A estas alturas sabemos que todas estas enfermedades son susceptibles de mejora y control con cambios en los estilos de vida, pero ello pasa por una irremediable dieta y la realización de ejercicio. Si todo ello va supervisado por un plan de educación nutricional, mucho mejor.

Por su parte, hace seis años, la Consejería de Bienestar Social, que ha promovido todo este evento, puso en marcha el Plan de Atención Nutricional, un proyecto que englobaba una serie de actuaciones para asegurar que los mayores tengan una adecuada alimentación.

Además, como medida preventiva, en los Centros Especializados de Atención a Mayores (CEAM) de la Comunitat Valenciana se imparten talleres de dietética y nutrición sobre obesidad, diabetes y sobrepeso. Los talleres consisten en unas sesiones teóricas impartidas por personal especialista en nutrición, con el objetivo de transmitir a los participantes la importancia de saber elegir los alimentos adecuados para prevenir o paliar estas patologías. Asimismo, los asistentes a estos talleres tienen la ocasión de elaborar menús diarios, aprendiendo a distinguir entre aquellos alimentos que perjudican o que benefician en cada una de estas enfermedades.

Y este es el tipo de medidas que esperamos se vayan desarrollando fácilmente en todas y cada una de las comunidades autónomas para que la sociedad se conciencie. El esfuerzo redundará en nuestros mayores, pero también en nosotros, que somos los siguientes.

Obra Social Caja Madrid también cuenta con unos manuales descargables en PDF para ayudar a envejecer con salud y prevenir la dependencia. Todos ellos, cuentan con consejos elaborados por expertos de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología. Mira este post (picha aquí) que hicimos sobre estos cuadernillos en el que se habla también de la importancia de alimentarse bien.

¡Qué cunda el ejemplo!