Cuando alquien nos refiere a un curso de formación online, nos viene a la cabeza una actividad bien diseñada, con tutorizaciones individualizadas, servicio las 24 horas, con unos contenidos muy bien pensados y adquiridos por un mercado pequeño, para cada acción, se entiende.
Pues no vamos a dejar de sorprendernos hoy tampoco. Resulta que nos hemos enterado de que la Junta de Comunidades de Castilla y León ha diseñado unos planes de formación online capaces de llegar al mismo tiempo a 11.000 personas. Si, no pienses que la cifra es una errata de este humilde escribano, que ya sé que las tengo con frecuencia. 11.000 empleados públicos reciben nada menos que el 75% de sus acciones formativas en formato online.
Claro, como muchas veces ocurre, la necesidad se convierte en virtud. Castilla y León es una Comunidad geográficamente muy amplia, y tiene nada menos que más de 6.000 centros de trabajo públicos repartidos por todo su territorio. De este modo, con programas de formación online se pueden ofrecer acciones formativas a personas distantes geográficamente, pero con puestos de trabajo similares en provincias distintas.
Esta forma de gestionar la formación pública no sólo es más eficaz y cómodo para los empleados públicos, sino que el ahorro de costes que supone que tantos miles de personas no tengan que desplazarse para recibir esa formación, es muy grande.
Como vez, hoy no nos ha tocado hacernos eco de nuevas herramientas o modalidades formativas; tampoco hemos hablado de nuevas ideas, sino de la apuesta por una buena gestión de los medios de los que ya casi todos disponemos. Es un placer haber podido traerte este ejemplo, pero ya sabes que no solemos decirte «hasta luego» sin un enlace que amplíe todo cuanto desees conocer.