
En muchas ocasiones, la distancia física entre fisioterapeuta y paciente es un hándicap para la recuperación de las dolencias o para la realización de los ejercicios. Para tratar de paliar este problema, dos estudiantes de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) han desarrollado el Proyecto MAR, un asistente virtual gracias al que un profesional podrá supervisar y tutorizar ejercicios de rehabilitación, sin necesidad de encontrarse en el mismo lugar que el paciente.
Para ello, los usuarios, tanto fisioterapeutas como pacientes, deberán entrar en la web del dispositivo Kinect, desarrollado por Microsoft, para realizar los ejercicios marcados, testar su efectividad y almacenar sus resultados.
Sus creadores, Antonio Marín y Rodrigo Olmo, han explicado que este desarrollo va más allá de los ejercicios que se realizan normalmente con los programas específicos para videoconsolas, puesto que en vez de utilizar un ‘cuerpo tipo’ permite medir ángulos de giro y de estiramiento de cada repetición y otros parámetros únicos de cada individuo.
La intención es que el usuario pueda ver sus progresos y, al mismo tiempo, que el profesional tenga unos parámetros medibles para ver que la progresión es correcta.
Esta iniciativa, que ha contado con el asesoramiento de profesionales expertos, se enmarca dentro del Club de Innovación de la Universidad Pontificia de Salamanca, que anualmente trata de conjugar conocimiento con aplicaciones que puedan ser utilizadas por el mundo empresarial.