Parece que está claro que la economía afecta a todos los sectores y obviamente también lo hace al medio ambiente. Pero lo que no nos podíamos imaginar, aunque bien pensado cae por su propio peso, es que los recortes tildados de “tremendísimos” por Raúl de la Calle en materia de prevención de incendios forestales pudieran poner en peligro este verano nuestros montes. Así nos lo ha contado este experto que es, además, secretario general del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales.
De la calle, de hecho, vaticina que:
Si se tiene en cuenta las condiciones meteorológicas que se están dando en España esta primavera y los recortes efectuados en prevención, el próximo verano puede ser un auténtico infierno para los montes en lo que a incendios se refiere
Así de alarmistas son los ingenieros forestales a fecha de hoy porque, según este profesional, hay un riesgo “enorme” de incendios forestales superiores a 500 hectáreas si el verano que viene es normal y como tal entiende el de uno que contenga altas temperaturas por un período largo, seco y acompañado de vientos.
Por lo visto, según esta fuente, que el pasado mes de marzo haya sido el más lluvioso de los últimos 75 años supone que los montes están “cargadísimos de combustible”, en plena “efervescencia”, que subraya De la Calle. Y es que, en palabras del secretario general del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales, si tenemos un verano normal y añadimos los recortes “tremendísimos” en materia de prevención de incendios forestales:
Nos podemos encontrar con un verdadero infierno
El pasado verano ya fue “muy malo” y la situación a priori para este, que se han realizado menos tratamientos en el monte, se ha gestionado menos y ha llovido mucho más en primavera, puede ser tan “pésima como el anterior”, apunta el experto. Y lo peor, en opinión de De la Calle, es que la inversión en prevención de incendios forestales ha sido nula esta temporada. Los recortes, nos cuenta, han supuesto la desaparición de empresas forestales a un nivel del 50% de las existentes.
El antídoto más socorrido para el próximo verano, de ser normal y unido a los recortes, será entonces vigilar adecuadamente y con mucha atención por parte de los profesionales, pero contando con la colaboración del ciudadano en los inicios de los fuegos y con los medios de extinción apropiados para los que, al menos, se ha mantenido el presupuesto. Lo cuenta De la Calle. Pues a abrir los ojos y no jugar con fuego.