
Hoy, más de un mes después del paso del tifón Haiyán por Filipinas, sigue habiendo 15 millones de personas afectadas, más de cuatro millones de desplazados y más de 1.000 centros de evacuación activos. Las consecuencias del desastre siguen estando presentes y no podemos dejar caer en el olvido a los protagonistas de esta tragedia.
Por eso, las ONG de cooperación unen sus esfuerzos para pedir a la comunidad internacional un apoyo más decidido, con el propósito de llevar a cabo las fases de postemergencia y rehabilitación (que podrían durar hasta dos años) en las zonas afectadas por el tifón también conocido como Yolanda.
La ONG Acción contra el Hambre recuerda que las consecuencias del desastre siguen estando presentes en nueve provincias del archipiélago y que, tras solventar las dificultades logísticas para acceder a las zonas más afectadas, las organizaciones humanitarias siguen trabajando para garantizar agua segura, saneamiento e higiene básicos, alimento y refugio a quienes han perdido su hogar.
No obstante, advierten que los procesos de postemergencia, que durará entre seis meses y un año, y de rehabilitación, que podría durar hasta dos años, no serán fáciles sin el apoyo de la comunidad internacional, que hasta el momento sólo ha comprometido el 49% de los fondos solicitados por las Naciones Unidas.
En este sentido, alertan de que algunos sectores, como la nutrición y los medios de vida (recursos materiales y sociales que se necesitan para cubrir las necesidad básicas de una familia), están particularmente sub-financiados, con sólo un 4% y un 8%, respectivamente, de la financiación requerida, según datos de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, según sus siglas en inglés).
Y es que tras la fase de primera emergencia, en la que se suministró agua potable y se dio respuesta a las necesidades alimentarias y de higiene de manera inmediata, es hora de abordar las fases de postemergencia y de rehabilitación, para devolver, con la mayor celeridad posible, la autonomía a la población golpeada por el desastre para que puedan vivir sin dependencia de la ayuda exterior.
Te dejamos aquí el enlace al post en el que detallamos cómo ayudar a las diferentes organizaciones humanitarias que trabajan en la zona, incluída Bomberos Unidos sin Fronteras (BUSF), que ha contado con el apoyo de Fundación Especial Caja Madrid, mediante la activación de su Plan de Emergencia.
Abastecer de agua potable y dar atención sanitaria en el albergue Phill Sicience de Taclobán (Filipinas) es la misión que Naciones Unidas ha encomendado a BUSF en Filipinas. Aquí os dejamos algunas imágenes del trabajo que están llevando a cabo en el albergue, donde dan cobijo a 350 familias, aproximadamente 2.500 personas.
Si quieres ayudarles a ayudar, puedes hacerlo con tu aportación a este número de cuenta: 2038 0603 28 6006434259