Se acaba de presentar en Madrid el Anuario de la inmigración 2009, un estudio completo sobre la situación laboral, legal, estudios, visados o trabajos solicitados por la población inmigrante en nuestro país.
Pero nos hemos querido centrar en el tema laboral, tan importante hoy en día por la crisis económica y ver cómo ha afectado ésta a este colectivo. Este incremento, según el catedrático de economía aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona y coautor de la publicación, Josep Oliver, se debe en un 70% al aumento de la población inmigrante, que en 2008 creció con fuerza a pesar de la crisis.
Eliseo Aja, catedrático de la Universidad de Barcelona y coautor también del trabajo, señala que:
«La crisis ha destruido alrededor de 300.000 empleos inmigrantes de un total de 3.500.000, lo que demuestra que la mano de obra extranjera sigue siendo de gran importancia en el mercado de trabajo español».
Con todo, los expertos advierten sobre el riesgo de que estos despedidos (por lo general con baja formación) originen un problema de paro estructural a medio plazo, y abogan por que el Estado estudie cómo reorientarlos laboralmente para su reabsorción en el mercado de trabajo.
Por su parte, la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, asegura que durante 2009 la inmigración en España decreció de forma significativa y ello indica, según sus propias palabras:
«El fin de un ciclo, y la transición hacia un modelo nuevo en que los flujos migratorios serán más reducidos y los perfiles de nuevos migrantes más equilibrados. De hecho, el cupo para 2010 se ha reducido un 80%, y se limita a profesiones de alta cualificación que faltan en España».