El Alto Tajo protege al águila perdicera

El río Tajo a su paso por el parqueAlimentado por el río del cual bebe su nombre, el Parque Natural del Alto Tajo transforma la vista de los visitantes con un escenario donde los colores, los ruídos y los olores, se visten de tintes ibéricos.

Con una pata en el agua y otra en la orilla, encontramos hasta nueve especies de anfibios que posan con tranquilidad, rodeados de flores y cercanos al ejército de álamos negros, sauces, olmos y tilos que hunden algunas de sus raíces en las profundidades del río. Unos metros más abajo, legiones de truchas y barbos se entrecruzan en un circuito imaginario de frenesí y orden, dominado por el color de un cielo por el que vuela con sigilo el águila perdicera.

Un animal de altos vuelos,  cuya historia es indisociable del ser humano. Objeto de persecuciones de todo tipo, víctima de la modernidad de los tendidos eléctricos, demandante de asilo medioambiental ante el deterioro de los hábitats y condenada a seguir dieta de por vida por la pérdida de alimento, el hombre ha sido la principal causa de la mengua de la especie. Tanto, que desde el 2004 tiene el dudoso honor de formar parte del Libro Rojo de las Aves de España.

Perseguida por el ser humano, esta especie debe hoy su vida, contradicciones del destino, a la acción de ciertas personas, en concreto, a las que trabajan en el Parque Natural del Alto Tajo, que desde 2001, ha seguido una política encaminada a su conservación.

Así, se han puesto en marcha técnicas de radioseguimiento, complementadas con un programa de alimentación suplementaria y la mejora del hábitat con la creación de palomares y vivares de conejos, además de la supresión de tendidos eléctricos peligrosos.

Un trabajo que se ha visto recompensado con el aumento de la reproducción de esta especie y con el segundo premio de ‘Buenas Prácticas de Conservación de Espacios Naturales’, otorgado por Europarc y la Fundación Biodiversidad. Un premio que se suma a reconocimientos como la Carta Europea de Turismo Sostenible y su futura declaración como Geoparque por la Unesco.