Prácticamente asegurada la supervivencia de dos especies vegetales vulnerables

Cardo de Coslada
Foto: Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de Madrid

Tenemos que remontarnos al verano de 2009 para encontrar información sobre dos singulares especies encontradas en un área urbana de la población madrileña de Coslada, próxima al Centro de Transportes de la localidad (CTC).

Hablamos de la Cynara tournefortii y Malvella sherardiana.  Su importancia fue señalada por Juan Manuel Martínez Labarga, profesor de Botánica Forestal de la Universidad Politécnica de Madrid quien, hace poco, ha insistido en madridiario.es que el enclave donde han estado estas dos especies era: “un mini paraíso botánico que habría que conservar”.

Resulta que las dos especies tienen una gran importancia científica, pero no tienen protección legal, ya que solamente han sido incluidas en el último Libro Rojo de la Flora Vascular y no en el Catálogo Regional de Especies amenazadas. La malva aparece como ‘vulnerable’ y esto, por lo visto, le otorga un riesgo de extinción alto (desde hacía más de un siglo no había constancia de su presencia en la región centro).

Por su parte, la situación del cardo es aún peor porque tiene mayor riesgo de extinción al haber disminuido de forma alarmante y parece ser que puede que exista en alguna otra población en la Península Ibérica, aunque posiblemente la de Coslada es la mayor población conocida.

Y todo esto porque esta zona de Coslada, un polígono industrial del CTC, se encuentra inmersa en un proceso de ampliación y para que este paraíso vegetal no sea destruido, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación Territorial ha trasplantado las especies con lo que, tal y como afirma esta institución en una nota de prensa:

Final feliz para el cardo de Coslada

Y es que el cardo, que aparentemente carecía de importancia medioambiental, ha resultado ser un cardo endémico prácticamente en peligro de extinción y, por lo visto, consiguió levantar un gran revuelo mediático. Precisamente por lo que la Comunidad de Madrid tuvo que intervenir y tras un plan para la recuperación de esa especie en concreto de cardo y la de la malva, según se afirma en la nota, han conseguido garantizar la superviviencia.

Así, se ha trasplantado ejemplares de las dos especies en varias zonas del Parque Regional del Sureste, pero además se han extraído del lugar 60 ejemplares que han ido al Caserío del Henares; 40 que se han llevado al Campillo, y 20 que han puesto ya en los Altos del Piul. En total se trasplantaron 300 ejemplares, aunque más de 100 se quedarán en la parcela del CTC y se trasplantarán a una zona verde donde no se va a construir y donde ya hay presencia de cardo. De esa manera, se asegura la especie en su localización original.

Por cierto, ya se se ha terminado de trasplantar los ejemplares (a mediados de diciembre) y se han realizado en los siguientes enclaves:

  • Zona ajardinada perimetral de Coslada: 20 ejemplares.
  • Vivero del PRS en el Campillo (Rivas-Vaciamadrid): 20 ejemplares.
  • Monte del Piul (Rivas-Vaciamadrid): 60 ejemplares.
  • Soto de las Cuevas (Aranjuez): 60 ejemplares.
  • Finca del Caserío del Henares: 60 ejemplares.

Si podéis ir a verlos… disfrutad.