Imagen de la semana: estamos con Japón

Fotos: Cruz Roja, Save The Children
Fotos: Cruz Roja, Save The Children

Estamos todos pendientes de las noticias que nos van llegando de Japón tras el terremoto y posterior tsunami que sufrió en su costa oriental el pasado 11 de marzo.

El quinto peor terremoto de la historia ha acabado con la vida de 6.539 personas y ha dejado 10.354 desaparecidos por el momento, según fuentes oficiales. Una catástrofe natural que, según Save The Children, ha provocado el desplazamiento de más de 100.000 niños, que se han visto obligados a refugiarse en centros de evacuación.

Poco a poco vamos conociendo los datos: contínuas réplicas que llegan incluso a 7 en la escala de Ritcher; alarma nuclear por la grave situación en la que se encuentra  la central de Fukushima; bajas temperaturas que complican la asistencia; cientos de desaparecidos que todavía no han sido identificados…

Voluntarios de Cruz Roja en el helicóptero de rescate

Como siempre, las ONG ya se han puesto en marcha y despliegan sus operativos, aunque es el Gobierno nipón el que dirige y lleva a cabo prácticamente toda la intervención. Más de 600 médicos, enfermeras y personal de apoyo de Cruz Roja prestan asistencia en las zonas afectadas a través de clínicas móviles.

(Para colaborar con el operativo puesto en marcha por la Cruz Roja Japonesa se puede llamar al 902 22 22 92, acceder a la página web www.cruzroja.es o enviar un sms con la palabra JAPON al 28077).

La ciudad de Asahi

Por su parte, Save The Children tiene un equipo en Sendai, una de las zonas más afectadas, y está estableciendo una base de operaciones para proporcionar ayuda de emergencia a los niños y niñas afectados y sus familias. Además hay equipos en camino desde Tokio para crear una red de espacios seguros para niños y niñas donde puedan jugar y que permitan a los padres darse un descanso mientras se registran para obtener ayuda de emergencia o buscan a otros familiares.

Son sólo dos ejemplos del trabajo al que ahora se enfrentan decenas de ONG desplazadas al terreno y que irán abriendo sus lazos solidaridad a todo el que lo necesite poco a poco. Desde aquí seguiremos muy pendientes de toda la evolución del país de su población, que sin duda está pasando por uno de los peores momentos de su historia.