Llevan bata médica, pero llena de colores, dibujos y figuras divertidas. Tienen todo tipo de artilugios curiosos, unos zapatos y una nariz de payaso. Son artistas profesionales, pero durante unas horas a la semana se convierten en los médicos más divertidos del hospital que visitan. Su tratamiento y receta son inmejorables: mucha diversión y conseguir la sonrisa más grande y más duradera del día. Se hacen llamar ‘Doctores sonrisa’ y vienen de la Fundación Theodora. El ‘doctor Flips’, un mago profesional, nos cuenta su experiencia:
“Lo primero que hago nada más llegar es hablar con el director del paciente. Él me pone al día de los niños que están ingresados, de su enfermedad y de las condiciones en las que se encuentran. Con esa lista bajo el brazo, comienzan mis visitas”.
“Decidí llevar sonrisas a los niños enfermos. Aunque a veces es duro, es un trabajo muy bonito porque son muy agradecidos; están todo el día aquí metidos, les pinchan y pasan malos ratos, pero cuando de repente entras en su habitación y les haces reír, te miran a los ojos, y al corazón. Si notan que les quieres, te regalan una sonrisa… y no hay nada mejor”.
La iniciativa nació en Suiza en 1993. Dos hermanos, tras ver cómo su madre sufría una enfermedad mortal con humor y una sonrisa, decidieron crear esta organización en su honor. Su nombre: Theodora. De esta forma, la organización se extendió rápidamente por Europa, y en 2000 llegaba a España. Ya son más de 15 artistas profesionales los que actuamos en 11 hospitales por muchas partes de España. A nivel mundial la cifra tampoco está mal, 130 doctores sonrisa han visitado ya a más de 500.000 niños en 80 centros en nueve países. Si quieres contactar con la fundación, puedes escribirles un mail a info@theodora.org