Videojuegos para conducir mejor

No hay duda de que para aprender a conducir un coche, manejar un videojuego, o programar cualquier aparato electrónico, hay que ser muy joven, casi un niño, o bien tener las facultades recién estrenadas, sin agotar. Y el caso es que los mayores, pasados los 50, comienzan a notar ciertas mermas en sus capacidades, entre otras, la de conducir.

Conocedora de los riesgos que esto conlleva, una compañía de seguros norteamericana quiere probar que los videojuegos, el arte de manejarlos, que no es poco, puede agudizar las mentes de los conductores más ancianos. Y eso les interesa. A ellos, los aseguradores, y a los otros, los conductores mayores.

Si los videojuegos logran mejorar la habilidad de los conductores mayores, podremos disfrutar de una nueva panorámica familiar. Los pequeños de la casa, armados con sus consolas y demás juegos electrónicos, discutirán con sus abuelos sobre los niveles que alcanzan y la dificultad de acabar con el enemigo, o llegar el primero a la meta en Mario car.

Además de ser una importante baza familiar, un aporte a la convivencia entre generaciones, la idea de ayudar a las personas mayores a mantener intactas o en plena forma sus habilidades, es muy buena, incluso viniendo de una compañía aseguradora que, en principio, busca sólo el menor coste posible por cada asegurado.

Esperemos que la adicción a los videojuegos, tan común entre los menores, no alcance a las personas mayores ni les afecte hasta el punto de conducir los auténticos coches, por carretera, como si de un rallye se tratara.