Lo llaman el sobrino del Sudoku, y tiene una explicación. Ha nacido del mismo creador, el japonés Maki Kaji, y ha sido presentado en Salamanca hace unos días.
Se llama Nurikabe, que significa literalmente pared pintada, y es un nuevo juego de inteligencia pensado para aquellos a los que se les hacía cuesta arriba el «tío» mayor.
Kaji dice que no se considera autorizado para opinar sobre los posibles efectos terapéuticos de sus juegos, a pesar de que psicólogos, psiquiatras y médicos aseguran que se está demostrando su beneficio, sobre todo en personas mayores.
Según afirma Ken José Thomson, urgenciólogo salmantino, promotor de la visita de Kaji al Centro Cultural Hispano-Japonés de la Universidad de Salamanca, afirma que son cada vez más las experiencias de utilización de estos juegos para estimulación mental en ámbitos como las residencias de la tercera edad.
«Hay psiquiatras, psicólogos y terapeutas ocupaciones que lo recetan, por lo cual es inevitable, y es una herramienta que está ahí».
Thomson se ha propuesto impulsar un grupo de estudio en el seno de la Universidad de Salamanca para dotar de base científica a la aplicación terapéutica de estos juegos en el área de la estimulación cognitiva.