Teresa Ribera, secretaria de Estado de Cambio Climático

Foto: Servimedia
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Aunque la Cumbre de Copenhague ha sido un fracaso, en España hay una mujer que cree firmemente que frenar el calentamiento global es posible. Teresa Ribera, secretaria de Estado de Cambio Climático, insta a los españoles a que pasen a la acción para acabar con este problema. Nuetras compañeras Leonor Lozano y Mayte Antona le han preguntado cómo.

Durante las navidades el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino ha puesto en marcha una campaña divulgativa para la reducción de las bolsas comerciales de un sólo uso. ¿Somos los españoles muy dados a utilizar las bolsas de plástico que tanto contaminan?

El Ministerio está trabajando es ese tema y colabora con el sector de la distribución para lograr reducir el consumo actual. En España se distribuyen anualmente unos 13.500 millones de bolsas de plástico, lo que equivale en peso a unas 98.800 toneladas. Esto significa que cada habitante consume unas 300 bolsas de plástico al año. También se consumen anualmente 2.080 millones de bolsas de papel, lo que equivale a unas 47 bolsas de papel/cartón por habitante y año.

Estas cifras se traducen en que es necesario gestionar anualmente cerca de 140.000 toneladas de residuos procedentes de bolsas comerciales de un solo uso. El Plan Nacional Integrado de Residuos 2008-2015 aprobado por el Gobierno en diciembre de 2008 incluye la reducción del 50 por ciento a partir de 2010 de las bolsas comerciales de un sólo uso y el establecimiento de un calendario de sustitución de plásticos no biodegradables y su prohibición progresiva también a partir de 2010.

¿Qué le parece que algunas empresas de distribución pidan a sus compradores que se lleven la bolsa de casa y que la utilicen más de una vez?

Me parece una iniciativa interesante y valiente, aunque se han producido algunas reacciones encontradas. Ahorrar costes forma parte legítima de cualquier negocio. Que las cuentas salgan mejor con un comportamiento más responsable es algo positivo. En cualquier caso no se trata de generar tensiones en sectores concretos, sino de marcar un proceso de transición donde el sector de producción de bolsas tenga un margen, sin generar traumas. Hay alternativas de embalaje más sostenibles, como el papel y el cartón, que obviamente hay que ir impulsando y que tendrán su efecto. Lo que no es asumible es el número de bolsas por habitante y año que se consume en este país.

¿Cuánto han caído las emisiones de gases de efecto invernadero durante todo 2009?

España ha registrado una caída superior al 18 por ciento en las emisiones de gases de efecto invernadero del sector eléctrico con respecto al año anterior, y en un  5,2 por ciento las imputables al transporte por carretera, mientras que en 2008 se registró una caída del ocho por ciento en las emisiones de gases de efecto invernadero. Estos datos son muy buenos, porque los de 2008 ya lo eran.

Reconozco que en 2009 la producción de electricidad ha caído, pero no creo que una diferencia del 10 por ciento del año 2008 al 2009 sea exclusivamente imputable por la crisis. La Ley de Economía Sostenible tendrá efectos positivos en la lucha contra el cambio climático. Permitirá identificar en un espacio limitado las grandes áreas de actuación donde es posible orientar hacia el futuro un modelo más eficiente.

¿Cómo se podrá almacenar CO2 bajo tierra? Parece una técnica complicada aunque puede ser una buena solución…

Desde el punto de vista teórico, equivale a lo que se hace con los almacenamientos de gas. Hay una estructura geológica donde se inyecta algo, en condiciones de seguridad, para que quede retenido durante muchísimo tiempo, sin ningún tipo de riesgo de fuga y siendo monitorizado permanentemente. Ese régimen de seguridad ha de convivir y ser congruente con la contabilidad, informe y verificación del sistema de comercio de derechos de emisión (ya que cada tonelada allí confinada de CO2 descuenta del total del inventario nacional, lo que afecta a distintas funciones y competencias del Estado y las comunidades autónomas.

¿Cuáles serán las funciones del nuevo Instituto de Cambio Climático de Zaragoza?

El Instituto de Investigación de Cambio Climático, que acogerá Zaragoza concentrará el conocimiento existente en España en la lucha contra esta amenaza ambiental. El trabajo lo inició un equipo de 20 personas hace un año, buscando articular un sistema de conocimiento en Zaragoza que no duplicara las capacidades que ya existen en España.

No tiene ningún sentido crear un “megacentro” que reproduzca en paralelo todas las líneas del saber en cambio climático, pero sí es capital ordenar las cosas como en una biblioteca, tener planificado el mapa del conocimiento, programar el trabajo y las respuestas con tiempo suficiente y concentrar el conocimiento disperso.