
Se llama Juan Cid, tiene 52 años y es padre de un joven con Trastorno del Espectro Autista. Recientemente ha sido elegido presidente de la Confederación Española de Organizaciones a favor de las Personas con Discapacidad Intelectual (Feaps), un movimiento que representa a más de 96.000 personas con discapacidad intelectual y 235.000 familias y desde el que trabajará para lograr su plena ciudadanía.
Cid, que toma el relevo de Pedro Serrano, se incorporó al ámbito asociativo en 1992, cuando su hijo tenía tres años. Empezó en la junta directiva de Gautena, asociación guipuzcoana de padres de afectados de autismo. En 2003 pasó a ser vicepresidente de la entidad y en 2005, presidente. Ahora ha dado el salto a la Presidencia de la Confederación.
Fue nombrado en Toledo, en el marco del Congreso Toledo 10, un evento que ha culminado un año de reflexión del movimiento Feaps en el que se han diseñado las líneas estratégicas de la organización para el futuro a partir de 10.000 ideas y aportaciones. Éstas han sido las primeras palabras de Cid como presidente:
«La misión del Movimiento Feaps es contribuir, desde su compromiso ético, con apoyos y oportunidades, a que cada persona con discapacidad intelectual y su familia puedan desarrollar su proyecto de calidad de vida, así como a promover su inclusión como ciudadana de pleno derecho en una sociedad justa y solidaria«.
Para Cid, este nuevo reto es:
«Una oportunidad para poder aprender y para poder aportar, en la medida delo posible, pero no yo sólo, sino en equipo. Tenemos una junta directiva y unos profesionales fantásticos. El movimiento asociativo es capaz de levantar lo que haga falta: aquí hay una fuerza y una energía que no es comparable con otros ámbitos».
Cid le pide al Gobierno que incida en la política social con una ley estatal del tercer sector:
«Se ha avanzado de manera importante con la Ley de Autonomía Personal que, conceptualmente, es encomiable pero su gestión y coordinación tiene recorrido de mejora. Sabemos que una cuarta parte de los dictaminados están pendientes de sanción y el proceso está siendo lento en su resolución».
Otra demanda del nuevo presidente de Feaps es:
«La generación de empleo y mantenimiento de los puestos de trabajo ya existentes reforzando las políticas de apoyo al sostenimiento de los puestos de trabajo iniciadas en 2009, porque los trabajadores con discapacidad intelectual son, por lo general, los eslabones más débiles de la cadena».
«En definitiva –concluye- solicitaremos las medidas que sean precisas para garantizar la inclusión en la sociedad, como ciudadanos de pleno derecho, a las personas con discapacidad intelectual. Su mejora de calidad de vida y las de las personas de su entorno. Es una constante que el movimiento Feaps reclamará de manera determinante solicitando las modificaciones o creación de decretos y leyes que sean necesarios».