Faustino es uno de los emprendedores de Ashoka, uno de los primeros en quien esta organización mundial se fijó al empezar a trabajar en España. A través de las Unidades Terapéuticas y Educativas (UTE), está cambiando el modelo de prisiones en España eliminando la subcultura carcelaria que convierte las prisiones en escuelas de delincuencia. Y a cambio está logrando poner en marcha un ambiente de confianza donde los valores positivos son transmitidos a través de la creación de micro-sociedades educativas.
Ya se pone en práctica en 5 prisiones españolas, donde internos y funcionarios desempeñan nuevos roles basados en la confianza para una mejor reinserción en la sociedad.
Con este modelo las tasas de reincidencia han descendido a un 10-25%, frente al 60-70% del régimen penitenciario tradicional.
La mejor explicación, este vídeo: