Los fríos invernales llegan a la Plana de Lleida (Catalunya) y las nieblas se han hecho habituales. Hoy el paisaje me recibe cubierto por un ligero manto blanco, pero no es nieve, se trata de niebla congelada. Las gotitas de niebla al contacto con la vegetación y con un suelo por debajo de los 0ºC han formado pequeñas agujas o escamas, cristales de hielo irregulares, que guardan gran cantidad de aire atrapado y que le dan esa tonalidad blanca. La naturaleza muestra una vez más con este hidrometeoro su lado más artístico.