El carácter de las gentes valencianas, en general el carácter de las gentes que nacieron mirando al mar, tiene algo de intrépido, de buscador de nuevas rutas y formas de hacer las cosas, algo de aventurero, por qué no decirlo.
Así las cosas, la Fundación Valenciaport lleva ya ocho años utilizando la formación online nada menos que dirigida a América Latina: el curso de Planificación y Gestión Portuaria y el de Gestión Portuaria en el Comercio Internacional. La distancia geográfica entre formador y formando obligó entonces a buscar otros recursos y aplicar una fórmula que, por otra parte, en aquella zona está mucho más implantada culturalmente que en España. Como ya habrás adivinado, estamos hablando de la formación online, claro.
Podremos buscar múltiples argumentos, como hacemos siempre, que justifiquen la implantación de técnicas de formación online, también en esta ocasión. Pero esta ocasión es algo distinta y por este motivo pedimos permiso a nuestros lectores para tomarnos la licencia de referirnos al carácter valenciano, intrépido, aventurero, pero servicial y oferente de sus conocimientos, saberes que han convertido al Puerto de Valencia en uno de los más importantes del mundo.
Debemos agradecer, y así lo hacemos, por saber que no hace falta ver las olas para saber de puertos, pero que siempre será necesario tener algo de marinero, se encuentre uno/a allá donde fuere.
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