Las lluvias de esta primavera serán insuficientes para acabar con la sequía

chica con paraguasLas lluvias que caigan en los próximos meses «no serán suficientes» para acabar con la sequía que ha dejado el invierno, «extremadamente seco» en España, según ha explicado recientemente Ángel Rivera, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Las previsiones de este organismo apuntan que esta primavera aportará una cuarta parte de las precipitaciones que se registran en todo el año. No obstante, esta cantidad no será suficiente para acabar con la sequía que ha dejado este invierno.

Según el responsable de la Aemet, «el escenario peor sería que la situación continuara como ahora», es decir, sin precipitaciones.

Aunque se esperan lluvias para los próximos tres meses, marzo no está ayudando a atenuar la sequía, ya que el nivel de precipitaciones sigue quedando por debajo del considerado normal.

Echando la vista atrás, según los datos históricos de los que dispone la Aemet,  este invierno ha sido el más seco, «con diferencia», desde 1947.

El año hídrico, que va de octubre a agosto (ambos incluídos), se está caracterizando por una «notable escasez» de precipitaciones en la mayor parte de España, «especialmente acusada» en las regiones de la vertiente atlántica, según Ángel Rivera.

El valor medio a nivel nacional de las precipitaciones acumuladas desde el 1 de octubre del año pasado hasta el 13 de marzo supone un 45% menos que el valor normal correspondiente a dicho periodo.

Y aunque se suele pensar que cuanto menos lluvias, mejor tiempo, esto no es cierto, ya que los meteorólogos señalan que el invierno que nos deja ha sido “más frío de lo normal”. Esto se debe a las temperaturas que nos dejaron los diez primeros días de febrero, inferiores en cuatro o seis grados a las habituales para esa época.

Medidas que ayuden a paliar la sequía

Con motivo de esta situación de sequía, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y las principales organizaciones agrarias acordaron ayer darse el plazo de una semana para trabajar en un bloque de medidas, con las que hacer frente a las dificultades que atraviesa el campo.

Además, el ministro del ramo, Miguel Arias Cañete, ha planteado en Bruselas un adelanto de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC), que irían destinadas al sector ganadero, el más perjudicado en estos momentos por la sequía y que está realizando un importante desembolso económico para alimentar a los animales.