Respuesta inmediata para atender a los afectados por el brote de malaria en Congo

Imagen de un centro de salud en la República Democrática del Congo
Foto: RDC 2011 © Ben Milpas

¿Sabías que la malaria es la principal causa de muerte en República Democrática del Congo? Cada año, esta enfermedad transmitida por mosquitos acaba con la vida de 180.000 niños menores de cinco años.

En la actualidad, varias regiones del país africano están sufriendo importantes brotes de malaria, una situación ante la que la ONG Médicos sin Fronteras (MSF) ya se ha puesto manos a la obra, dando apoyo al Ministerio de Salud congoleño en las provincias Oriental, de Maniema y de Ecuador, donde ya han atendido a más de 17.000 personas.

La falta de recursos, de infraestructuras y de personal sanitario con la formación adecuada no permiten, según la ONG, que el sistema de salud en República Democrática del Congo pueda organizar una respuesta adecuada ante la crisis, más aún cuando la causa precisa del brote de malaria es incierta.

Dispensar atención médica en zonas remota supone un gran reto humano y logístico. En palabras de la coordinadora de proyectos de MSF, Carole Coeur, las aldeas en las que trabajan son “en su mayoría inaccesibles por tierra”. Así, los equipos “se desplazan en moto, canoa o a pie, llevando consigo los suministros médicos necesarios”.

En concreto, la ONG está tratando los casos de malaria más graves en los hospitales de referencia, mientras que los casos menos complejos se tratan en centros de salud o clínicas móviles.

Por su parte, el doctor Jorgen Stassijn, especialista en malaria y miembro del equipo de MSF que trabaja en la provincia de Ecuador, destaca que “para contener la enfermedad no basta con un enfoque meramente preventivo como la distribución de mosquiteras. También tenemos que tratar a tantas personas como sea posible”.