Científicos del Instituto de Investigación Scripps, en Florida, han encontrado varios compuestos que pueden ser candidatos a fármacos con capacidad de dirigirse a las vías biológicas – caminos o pasos metabólicos que la célula realiza – en la destrucción de las células cerebrales responsables del Parkinson.
El trabajo, publicado en la revista Journal of Medicinal Chemistry and Scientific Reports, señala que es posible diseñar candidatos altamente eficaces y destinados a proteger la función de las mitocondrias, que proporcionan energía a la célula y previenen la muerte de las células cerebrales.
Pero, ¿por qué estos medicamentos pueden ser candidatos altamente eficaces para ‘bloquear’ el Parkinson? Pues porque, tal y como señala la investigación, estos fármacos actúan sobre lo que se conoce como las JNK, que son proteínas ligadas a muchos de los componentes característicos de esta enfermedad neurodegenerativa, tales como el estrés oxidativo y la muerte celular programada.
En concreto, las JNK3 actúan especialmente en el cerebro, y este innovador tratamiento es “el primero que puede penetrar en el cerebro y ser activo sobre células funcionales que miden la disfunción mitocondrial”, según explica – en este enlace – el director del estudio, Philip Lograsso.
Además, las JNK3 juegan también un papel importante en el desarrollo de otras enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer e incluso, según el equipo de investigadores, también se considera la posibilidad de que este tipo de fármacos resulten potenciales para el tratamiento de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).