Parece que el proyecto ‘Naturaleza y Hombre en la montaña pasiega’, puesto en marcha por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) junto con la Fundación Naturaleza y Hombre, va consiguiendo objetivos. De hecho, se han plantado hasta el momento 10.000 ejemplares de árboles autóctonos en 14 hectáreas, aunque el objetivo, para finales de 2011, es llegar a las 20 hectáreas reforestadas.
Y es que hace unas semanas se presentaron en Santander los logros y el futuro de este proyecto piloto para la mejora y conservación de la biodiversidad entre Cantabria y Castilla y León.
‘Naturaleza y Hombre en la montaña pasiega’ cuenta con una subvención del MARM de 533.301 euros para el periodo 2009-2011 y pretende poner en marcha diferentes acciones específicas de conservación de la naturaleza como la reforestación y el mantenimiento de los bosques, la dinamización social, y la recuperación del patrimonio arquitectónico local. También contempla la creación de un rebaño de variedades locales de ganado (oveja lacha, caballo losino, y burro), para replicar métodos tradicionales de gestión ganadera pasiega.
Y es que, gracias a esta iniciativa, que se enmarca en la Red Rural Nacional, se ayuda a la biodiversidad siguiendo métodos tradicionales como la siega de verano con el desbroce de las lindes, la muda o el pastoreo de razas domésticas autóctonas, como el caballo losino, la vaca roja pasiega, el burro español y la oveja lacha.
Otro de los logros del proyecto ha sido verificar el incremento de los ejemplares de rebeco en un 22%, siendo 95 los ejemplares actualmente censados. En este sentido, también ha quedado constatada la exitosa adaptación de las 19 crías nacidas durante 2010. Asimismo, se han identificado y monitorizado 300 parejas de aves que anidan en los cortados calizos de la montaña, como buitres, alimoches y halcones peregrinos.
Otro de los ejes prioritarios del proyecto ha sido la recuperación del patrimonio pasiego, con la rehabilitación del interior de dos cabañas en San Roque de Riomiera usadas para el ganado, y la restauración de la lobera del alto del Caballo, en Espinosa de los Monteros.
Pero además, hay que destacar el carácter global de educación ambiental que está presente en todo el proyecto, ya que la puesta en valor del entorno natural y patrimonial es de vital importancia para su conservación.
De esta forma, desde el inicio de la actuación en 2009, 200 escolares de Cantabria y de Burgos han realizado la muda (traslado entre cabañas) con las ovejas y las vacas de la explotación de la Fundación Naturaleza y Hombre, aprendiendo los valores de las razas autóctonas locales y el método de gestión tradicional.
Igualmente, ‘Naturaleza y Hombre en la montaña pasiega’ refuerza las instalaciones del Ecomuseo-Fluviarium, de Liérganes, un espacio que alberga especies marinas y fluviales de la montaña pasiega y recoge un museo de los usos tradicionales de la zona.