Desde el 1 de diciembre, aprovechando que era el día mundial contra el SIDA, varios artistas animados por Alicia Keys han decidido suspender su actividad virtual en redes sociales (fundamentalmente en Twitter) hasta conseguir que sus seguidores donen un millón de dólares a una ONG que trabaja, precisamente, para niños con SIDA.
No sé si ya ha habido alguna iniciativa similar, pero creo que es la primera «huelga de redes sociales». No todos los famosos son capaces de «cogerle el tranquillo» a esto de twittear, pero para aquellos que logran integrarlo en su día a día, supone una forma brutal de comunicarse con todos sus fans. Y el hecho es que tienen miles… millones de seguidores. Y para algunos de ellos tanto Twitter como Facebook son ya herramientas imprescindibles de promoción.
La iniciativa parte de la institución benéfica administrada por la cantante Alicia Keys (@aliciakeys), Keep a Child Alive (que se traduce como «Mantén un niño con vida»). El fin de esta ONG es ayudar a la infancia enferma de sida.
Y ya son varios los artistas que se han unido a esta nueva forma de fomentar obras de caridad: Lady Gaga (@LadyGaga), Justin Timberlake (@JTimberlake), Usher (@usherraymodniv), Jennifer Hudson (@iamjhud), Ryan Seacrest (@RYANSEACREST), las hermanas Kardashian (@kimkardashian, @kourtneykardash, @KHLOEKARDASHIAN), Elijah Wood (@elijahwood) y un montón más…
Hay quien se ha puesto una foto dentro de un ataúd o bien una foto en plan funeral americano. También hay quien ha suspendido temporalmente la cuenta. De los que la mantienen activa, cada pocas horas emiten un mensaje diciendo que están digitalmente muertos hasta que recuaden el dinero, indicando a sus seguidores cómo donar 10 dólares (a través de mnsajes de textos y códigos de barras).
Bueno, como casi todas las iniciativas solidarias que llevan a cabo personajes famosos de manera pública, me debato entre dos sentimientos: Qué buena forma de aprovechar la influencia que tienen los famosos para mover a sus seguidores a colaborar con una ONG, y por otro lado, no dejo de pensar en el beneficio de imagen que obtienen estos famosos a costa de una situación dramática.
No deja de ser, en cualquier caso, una iniciativa filantrópica que involucra las nuevas tecnologías. Veremos cuánto dinero se logra recoger y en cuánto tiempo. A partir de ahí seguro que surgen nuevas ideas y formas de aprovechar el tirón de las redes sociales.