Una escuela de arte para personas con discapacidad, así es Bilbao FormArte

Cuadro Bilbao FormArte
Foto: Bilbao FormArte

El arte sin barreras. Este es el lema que lleva por bandera Bilbao FormArte, una escuela de arte que nace de la necesidad de formar a jóvenes con discapacidad en este campo. Así nos lo cuenta Ana Urgoiti, una de las tres fundadoras de este bonito proyecto.

Desarrollar su propia obra, continuar su educación a través de las artes plásticas y aumentar la creatividad de las personas con discapacidad es el objetivo de Bilbao FormArte que pretende así proporcionar al alumno un crecimiento tanto a nivel artístico como personal.

Pero lo cierto es que unir discapacidad y arte no siempre es fácil. Estas tres emprendedoras, dos licenciadas en Bellas Artes y una en Educación Especial saben como hacerlo:

Nuestra máxima es enseñarle al alumno aquello que él quiera aprender, nunca imponerle nada. Empezamos a trabajar viendo lo que quiere cada uno porque el trato es totalmente personalizado

La metodología de la escuela consiste en aportar herramientas necesarias a los estudiantes para que desarrollen su trabajo dentro de los diferentes cursos de pintura, dibujo, escultura o diseño gráfico que ofrecen.

Además, Ana Urgoiti insiste en la importancia de que el alumno con discapacidad “aprenda aquello que le interese aprender” por lo que Bilbao FormArte “profundizará en los campos que mejor se defiendan para definir su propio estilo”.

A pesar de ser un centro muy especializado los precios no son disparatados. Desde 60 euros al mes ya se puede disfrutar de estas clases

Y es que la discapacidad no tiene por qué resultar una barrera para desarrollar el talento de los artistas. Estas tres jóvenes se han dado cuenta de ello y Bilbao FormArte es el vehículo para demostrarlo.

Así, “aceptar las capacidades y limitaciones de cada uno en el campo de la expresión plástica y obtener una satisfacción a través del trabajo personal” será la última finalidad de esta escuela de arte. Desde aquí os animamos a visitarla porque, quién sabe, igual esa visita se convierte en el principio de una carrera artística.