Una epidemia amenaza a la población de conejo silvestre en España

Conejo silvestre
Foto: © WWF

El agua y los sedimentos del suelo hacen posible el crecimiento de árboles y pastos en el medio natural. Estas especies vegetales son, a su vez, el sustento de infinidad de animales silvestres que viven en la naturaleza. Hablamos de vacas, ciervos, ovejas, roedores o conejos, muchos de ellos importantísimos en la dieta de otras especies como el buitre o el águila imperial.

La naturaleza vive siempre en equilibrio, pero a veces éste se ve alterado por amenazas que se ciernen sobre él, como la mano del hombre o el brote de epidemias que acaban diezmando la población de alguna especie esencial para mantener la cadena trófica.

Es lo que está provocando una nueva epidemia que afecta a los conejos y cuya vacuna no se muestra muy efectiva con una nueva variante de la enfermedad, más agresiva. Las organizaciones conservacionistas SEO/BirdLife, WWF y Ecologistas en Acción nos trasladan su preocupación por la entrada en España de la nueva variante del virus de la enfermedad hemorrágica. La cepa es tan devastadora que produce mortalidades de entre un 30 y un 40% en conejos domésticos, que se le han transmitido a los silvestres.

Tuvo su origen en verano de 2010 en Francia y en 2011 la nueva cepa hemorrágica se detectó por primera vez en granjas cunicultoras españolas. También se  ha comprobado su presencia en conejos silvestres en Aragón.

La enfermedad, una vieja conocida

Los expertos aún recuerdan cómo en los años 80 la enfermedad hemorrágica diezmó la población de conejo en España y provocó el colapso de la especie en muchos puntos donde todavía no se ha recuperado del todo. Pero el problema vas más allá, porque el conejo es una de las principales fuentes de alimentación de especies en estado crítico de conservación, como el águila imperial ibérica o el lince ibérico, que han ido remontando paulatinamente a base de esfuerzos a favor de su conservación y a medida que resurgía la población de conejo.

Una de estas iniciativas es la desarrollada por Obra Social Caja Madrid, en colaboración con la Fundación Global Nature para la recuperación del conejo en zonas como el Monfragüe, que conjuga actuaciones de repoblación de la especie con programas de concienciación medioambiental, como ya te contamos aquí.

Sobre esta nueva amenaza, la responsable del programa de conservación del águila imperial ibérica de SEO/BirdLife, Sara Cabezas, destaca:

La expansión de esta nueva variante podría comprometer el proceso de  recuperación de determinadas poblaciones de conejo silvestre y con ello los programas de conservación de especies amenazadas como el águila imperial o el lince

Por su parte, el responsable de conservación de especies de Ecologistas en Acción, Miguel Ángel Hernández, considera que:

En la situación de recortes actuales, las administraciones  responsables de la conservación de la naturaleza tendrán poco margen para afrontar medidas de gestión ante un eventual descenso de las poblaciones de conejo y de sus predadores

Ante esta situación, SEO/BirdLife, WWF y Ecologistas en Acción exigen la localización de  las  granjas cunicultoras y las poblaciones de conejo silvestre afectadas por la nueva cepa, así como que se  analice la dimensión de  la afección y su evolución, además de su vía de transmisión.

Por otro lado, las organizaciones conservacionistas exigen medidas de control para evitar el contagio entre granjas, así como la puesta en marcha de medidas para reducir al máximo el contagio y la expansión de la nueva cepa entre conejos silvestres.

Además, apuestan por el establecimiento de una red de vigilancia en todas las Comunidades Autónomas, que permita la alerta temprana de posibles focos. Por último, piden que se establezca una estrategia nacional de conservación para el conejo de monte, por su importante papel en los ecosistemas ibéricos.