Saber gestionar el desempleo emocionalmente

inteligenciaNo será una buena forma de terminar el año si lo hacemos en situación de desempleo. El hecho de estar en paro supone una tragedia en la mayoría de los casos: hipotecas que no se pueden pagar, vuelta al hogar paterno, negocios cerrados por citar algunas. La crisis golpea y estas situaciones además de ponernos en estado de crisis personal pueden acarrear problemas para la salud.

Aumento de cuadros de ansiedad, depresión, crisis nerviosas, inseguridad, perdida de confianza y autoestima. Ojo que no son males menores que la falta de dinero. Es más, inmersos en estos cuadros de falta de salud emocional y física, la remontada de la situación puede ser menos posible.

Así las cosas veamos las cosas de frente y prestemos atención, mucha atención, a nuestro equilibrio emocional. Podemos entrar en una fase de descuido de pautas básicas (sueño, comida…) y dar paso a conductas adictivas no positivas. No es un problema somero y para muestra de su importancia el hecho de que la Organización Mundial de la Salud lo tenga definido como un deterioro bio-psico-social.

Ante la situación de desempleo podemos tener la tendencia a considerarnos culpables, inútiles para el entorno familiar al no poder aportar ingresos económicos y fracasados al no disponer de opciones de futuro. No se puede negar, sin opciones profesionales el desarrollo personal se ve muy mermado cuando no ha sido esta una opción voluntaria. Estas actitudes pueden traer consigo problemas físicos como ansiedad, insomnio, estrés, irritabilidad que pueden degenerar en cuadros depresivos.

Lo primero es tomar conciencia del estado emocional y visualizar los potenciales personales que seguimos teniendo y no se han quedado tras la puerta del despido. El valor personal está en lo que cada persona es, no en el entorno que nos rodea a cada uno. Se trata de hacer de los problemas oportunidades y eso es posible con inteligencia emocional.

1-No admitir emociones negativas. Remar tu propia canoa. Recuperarse de los golpes, caídas y adversidades.

2-Libera tus bloqueos, reconoce tus limitaciones y capacidades siendo honesto. Busca la motivación desde el conocimiento de tus habilidades.

3-Eres emocionalmente inteligente por la actitud que tengas en cada momento no por tu CV.

4-Muéstrate dispuesto  a obtener beneficio del aprendizaje y si no estabas en esa actitud, ahora es el mejor momento para aprovechar y seguir aprendiendo.

5-No te angusties, solo hay viento favorable para quien sabe a donde va. Fija tus nuevas metas, se constante y determinado.

Si controlas tus emociones la búsqueda de empleo será más fácil y productiva. El éxito personal llegará.