De la noche a la mañana pasó de ser un director de documentales que mendigaba subvenciones y pasaba apuros para llegar a fin de mes, a dedicarse a un proyecto fotográfico que se ha convertido en el proyecto de su vida y gracias al que ya no debe preocuparse por el dinero. Así se autodefine Gregory Colbert, el artista canadiense que ha deambulado por el mundo durante diez años haciendo fotos de animales sin que nadie supiera de su proyecto.
Colbert se embarcó en esta aventura con el objetivo de demostrar que hombres y animales pueden convivir en armonía y respeto. Así pues ha realizado más de 60 expediciones colaborando con más de 130 animales como ballenas, elefantes, guepardos, orangutanes, perros salvajes, cocodrilos y águilas reales entre muchas otras especies.
Y, ¿cuál ha sido el resultado? Colbert ha sido el primer artista al que se le cedió el Arsenal, el célebre edificio dónde se realiza la Bienal de Arte de Venecia, para la presentación mundial de ‘Ashes and snow‘en 2002. Una exposición de 200 imágenes en las que el hombre se comunica e interactúa con los animales en su hábitat natural. Tal fue el éxito que la exposición ya ha recorrido Tokio, Ciudad de México, y varias ciudades de EEUU. Si quieres ver la exposición pincha aquí.
“Cuando empecé Ashes and Snow en 1992, quería explorar la relación entre el hombre y los animales desde adentro hacia afuera. Al descubrir el lenguaje compartido y las sensibilidades de todos los animales, estoy trabajando para restaurar el territorio común que existió alguna vez, cuando la gente vivía en armonía con los animales”
La ‘Animal Copyright Foundation’ es otra de las iniciativas de Colbert que propone a los anunciantes a invertir el 1% del presupuesto de cada anuncio en el que aparezcan animales en espacios naturales o en proyectos de mejora del medio ambiente. Colbert explica que:
“Cada año las multinacionales gastan billones de dólares en la publicidad de sus productos, y utilizan para ello a los animales y la naturaleza. La ‘Animal Copyright Foundation’ proporciona a las compañías una manera reconocible para comunicar su conciencia y compromiso con la preservación de los hábitats naturales y las especies de nuestro planeta.”