Payasos sin Fronteras: la risa, medicina del alma

Fotografía de Payasos sin Fronteras
Fotografía de Payasos sin Fronteras

El humor y la risa, esos medicamentos que no se venden en farmacias y que no sólo son capaces de curar las heridas del cuerpo sino también las del alma, son el principal antídoto de Payasos sin Fronteras para afrontar las injusticias del mundo. Allá donde sea necesario alegrar el día a día de las personas que sufren, podemos encontrar a los artistas de la ONG siempre dispuestos a despertar una sonrisa.

En 1993, cuando el conflicto entre serbios y croatas por la independencia de los últimos se encontraba en su máximo apogeo, en el campo de refugiados de Veli Joze se gestaba una idea que desembocaría en la creación de Payasos sin Fronteras, una ONG con los beneficios del buen humor y la risa como bandera. El germen de PSF surge de un programa educativo barcelonés llamado “Educación para la paz”, que puso en contacto a niños españoles con niños croatas. Fue así:

Uno de los niños españoles pensó que un buen regalo de cumpleaños para su amigo croata sería organizarle una bonita fiesta. Y, ¿qué mejor fiesta de cumpleaños, que aquella que se celebra en compañía de payasos? Dicho y hecho. Tortell Poltrona, payaso catalán del ‘Circ Circ’, hizo su maleta y partió hacia Croacia para transmitir su alegría a los niños. A la vuelta de este viaje, comprendió la importancia del payaso y del humor en situaciones como esta, y decidió crear una asociación para que los payasos pudieran llevar la sonrisa a todos aquellos niños y niñas del mundo que, por situaciones injustas (guerras, catástrofes naturales…), viven en condición de refugiados.

Quince años después, Payasos sin Fronteras se preocupa de trasladar sonrisas a aquellas zonas que más lo necesitan. María Colomer, presidenta de PSF asegura que:

“Nuestra misión es que no haya ningún niño ni niña en el mundo sin sonrisa. “Algo difícil”, porque en estos momentos en los que los enfrentamientos bélicos crecen y se perpetúan, en los que las catástrofes naturales siguen aumentando y ensañándose con los más débiles, con los más pobres”.

Desde esta ONG afirman que las artes escénicas pueden contribuir a que un mundo más justo sea posible. No podemos olvidar que el arte es una forma de expresión de todos los pueblos, capaz de unir a personas de diferentes culturas o situación social. En este sentido en Payasos sin Fronteras apuestan por un concepto de salud integral, que va más allá de las meras necesidades físicas para tener también en cuenta las necesidades psicológicas, intelectuales y espirituales de las personas.

Aquí es donde entran el Arte y sus diversas manifestaciones. En PSF, son las artes escénicas: la figura del payaso y las demás artes circenses. María Colomer explica la importancia de la sonrisa:

“La sonrisa es el síntoma de que nos tomamos la vida con alegría, de que sabemos que no podemos controlar todo lo que nos pase, por muy malo que sea y, por esta razón, nos permite no quedarnos anclados en estados emocionales que se producen cuando el sufrimiento es grande, y nos posibilita mirar las cosas desde un punto de vista diferente, comprobando que otra actitud es posible».