El bastón, una poderosa arma blanca

Seguro que alguna vez te has cruzado con una persona ciega por la calle. Obviamente, lo habrás identificado por su bastón blanco, por el ruido que éste produce al deslizarse por el suelo o quizás haya llegado a rozar tus pies. Pero, ¿sabes cuál es su finalidad y cómo se utiliza? Su objetivo principal es ayudar a caminar de manera autónoma, detectando irregularidades en el suelo (como agujeros, bordillos…) y anticipando objetos o personas para evitar posibles tropiezos.

Y te preguntarás, ¿cómo lo manejan exactamente? Resulta imprescindible que el bastón nos informe en todo momento de lo que hay delante de nosotros. Para ello, el ciego hace un arco con su bastón, siempre en sentido contrario del que llevan sus pasos: si adelanta la pierna derecha, el bastón estará en la izquierda y si avanza la pierna izquierda, éste irá hacia la derecha.

Con el arco detectamos objetos como bolardos u otros que puedan estar a la altura del suelo, estamos al tanto de si tenemos sitio para pasar entre dos coches o si el paso está libre a la hora de subir o bajar un bordillo. Además, el hecho de deslizar el bastón por el suelo nos indicará los cambios de textura del mismo, que nos son de referencia para detectar la proximidad de un cruce o cuándo hemos llegado a su final.

A la hora de bajar escaleras, el bastón irá siempre un peldaño por delante de nosotros, indicándonos cuando lleguemos al último, y de igual forma a la hora de subir.

¿Y qué hacer si ves a un invidente con su bastón? Pues si le conoces, salúdale. Si le ves seguro, déjale ir, él sabe lo que está haciendo. Y si está desorientado o dudoso, pregúntale si necesita ayuda. En ningún caso le cojas del brazo sin avisar (cosa que hace mucha gente con toda la buena voluntad del mundo) ya que puede resultar algo molesto o desorientador. En todo caso, puedes facilitarle el camino si le avisas de la existencia de algún obstáculo ocasional.

El universo de los bastones también evoluciona y no será raro en el futuro ver artilugios que nos ofrezcan más información mediante sensores o vibración, o incluso un GPS conectado a nuestro bastón que nos guíe por las calles desconocidas.

Como supongo sabrás, existen otras técnicas de movilidad como el ir acompañado por una persona que ve o el perro guía. Pero en mi opinión, el bastón resulta imprescindible y útil para tener una movilidad totalmente autónoma e independiente.

Miguel González Richart, joven ciego.