A través de la música y con mucho ritmo, JOCCA (Joven Orquesta y Coro de Guatemala) ha logrado lo que aún no han conseguido los acuerdos políticos: unir a Centroamérica. Se trata de una orquesta formada por 200 jóvenes, de distintos países centroamericanos, de entre 18 y 25 años, que tienen en la música a un instrumento de esperanza para la cooperación, el desarrollo y el acercamiento entre pueblos y culturas.
JOCCA es un ambicioso proyecto itinerante, que impulsado por la ONG española del Instituto Internacional de Música Ibérica (IIMI), cada año se celebra en uno de los países de Centroamérica para lograr el objetivo de mejorar la vida de las personas a través de la música.
Ellos son el ejemplo de que la música puede llegar a destruir fronteras y conflictos. Así lo reafirma el director de JOCCA, David Gálvez, con sus propias palabras:
“la música para muchos de ellos, sobre todo los que provienen de países como El Salvador, Honduras o Nicaragua es ‘un clavo ardiendo’ al que se agarran para no andar perdidos o caer en la delincuencia’.
El IIMI es una institución pedagógica y musical, pionera en España, cuyo objetivo es la búsqueda del desarrollo integral a través de la práctica musical. Se trata de una innovadora modalidad de cooperación que se apoya en la música como la más pura expresión cultural entre los humanos, las civilizaciones y las culturas.