El lago de las fochas

Fotografía: Focha común (Fulica atra), Estany de Banyoles. © Andoni Canela
Fotografía: Una hembra de focha común (Fulica atra) con uno de sus pollos. Lago de Banyoles. © Andoni Canela

Este mes de mayo es una época de gran actividad para las aves en el lago de Banyoles (Girona). Escucho cerca de lo juncos un sonido alto y breve, quiuc, quiuc…, son fochas. Abundantes en los humedales ibéricos, tienen en este lago de aguas profundas y tranquilas una importante población. Entre la vegetación ribereña veo una familia que nada en busca de alimento para sus pequeños. Observo en la madre un llamativo escudete frontal de un blanco intenso que cambia en los polluelos hacia una coloración más bien ocre. Resulta divertido ver cómo se sumergen y bucean para conseguir los tallos y semillas de las plantas acuáticas. Está considerada como una especie omnívora por lo que también consume alimentos de origen animal, especialmente durante la época de reproducción y cuidado de los pollos, sobre todo moluscos, lombrices y escarabajos acuáticos. Procuro no acercarme, las fochas son muy protectoras con sus polluelos y con sus nidos, y pueden llegar a ser muy agresivas si me aproximo demasiado.

Continúo mi camino junto al lago, origen y principal seña de identidad de la ciudad de Banyoles.  Sus aguas llegan hasta aquí principlamente de forma subterránea provenientes de la Alta Garrotxa.

Se trata de un espacio de gran valor ecológico, geológico y paisajístico, cuyo origen se remonta a la Era Cuaternaria (hace 250.000 años). Aún hoy, puede verse en el lago cómo tiene lugar el lento proceso de formación de rocas. Los travertinos, especialmente visibles en la orilla sur y este del lago, son estructuras finamente estratificadas, porosas e irregulares, originadas por la precipitación de las abundantes sales carbonatadas que contiene el agua. Estos bloques representan un hábitat muy valorado por los pequeños animales acuáticos que encuentran en ellos refugio y alimento.

El Lago de Banyoles es considerado como el conjunto kárstico más extenso de la península Ibérica, fue declarado por la Generalitat de Catalunya como zona integrada en el Plan de Espacios de Interés Nacional (PEIN) e incluido en el 2003 en la lista Ramsar de Zonas Húmedas de Importancia Internacional.