Hemos entrevistado a Jesús Calleja, el famoso aventurero montañero del programa ‘Desafío extremo‘. Este leonés universal tiene el corazón dividido entre León, donde nació, y el Himalaya, las montañas que le han enamorado durante muchos años.
Un buen día comenzó a grabar con su cámara las expediciones en las que participaba, y así empezó a salir en televisión. Ahora presenta en la cadena de TV Cuatro un programa de éxito que viene cargado de novedades. Gracias a Jesús y a sus compañeros la Tierra nos parece más accesible y nos recuerda que es frágil y que hay que cuidarla. Además de subir montañas, su gran pasión, ha participado en rallies, ha buceado y ha conducido avionetas.
“¿Qué hace un chico de León en los lugares más recónditos del planeta”, le preguntamos. A lo que Jesús dice que lo que hace es:
“explorar, vivir aventuras, disfrutar con las diferentes culturas que vamos conociendo y recorrer este maravilloso planeta que tenemos”.
Y en esas aventuras en las que participa ha descubierto que se puede
“disfrutar de la naturaleza al máximo sin practicar deportes extremos”.
Aunque, eso sí:
“el chute de adrenalina que te dan los deportes de riesgo no te lo da un paseo por el monte, pero es igual de bonito, ¡a mí me gusta todo! Me gusta escalar, los trekkings, bucear, volar… no podría elegir, en mi mundo va una cosa ligada a otra”.
Además este intrépido montañero cree que el deporte le ha aportado muchos grandes valores. Estos son los que destaca Jesús:
“La superación, el buen compañerismo y la voluntad de mejorar”. También nos cuenta que el contacto con la naturaleza le ha transmitido humildad. Y eso es, según dice, “porque te pone en tu sitio, te muestra que somos una pieza más en el engranaje”.
Además nos confiesa que su lugar favorito está en lo alto de las montañas, pues hace mucho tiempo se quedó prendado del Himalaya y que no se ha podido separar de él.
“Bichos” peculiares
En sus aventuras por el mundo Jesús se ha topado con animales muy peculiares.
“Los gorilas de Selva Impenetrable de Bwindi, en Uganda. Apenas quedan unos cientos de ejemplares, y es urgente conservar su hábitat y protegerlos. Los tiburones tigre también me sorprendieron y fascinaron. Es como si te pasase un torpedo de varios metros de longitud rozando la cara, y que ese bicho sea uno de los tiburones más peligrosos del planeta… ¡es toda una experiencia! De las más radicales que he vivido en mi vida”.
Conocer a esos “bichos”, como él nos explica, también tiene otras ventajas. Confiesa que tener la oportunidad de verlos en su hábitat salvaje supone poder volverse “inmediatamente” más consciente de lo importante que es preservar su vida, sus hábitats.
“Son seres increíbles muy amenazados por el peor depredador que existe, que somos nosotros, los seres humanos. Y eso no puede ser, no debería ser así”, dice el aventurero.
Jesús añade que se pueden aplicar todas esas experiencias, valores y aprendizajes a la vida diaria y que “hay que valorarlo todo y disfrutar de la vida al máximo”. Por eso, su consejo es:
“Lo que no te guste, hay que tratar de mejorarlo, y cambiarlo”.
Boquiabierto ante la discapacidad
De momento no ha tenido la oportunidad de compartir una aventura con una persona con discapacidad, pero dice que “sería muy especial” y que “estaría encantado” de hacerlo.
Los deportistas paralímpicos suelen decir que en el mundo del esquí adaptado o el buceo, por ejemplo, no hay barreras para las personas con discapacidad. Jesús nos cuenta que ha visto gente con grandes minusvalías en esquí, y que se ha quedado “boquiabierto”. Nos confiesa:
“Creo que consiguen obtener una sensación muy grande de libertad, son unos máquinas”.
Cuando responde a esta pregunta, Jesús acababa de regresar de Mongolia. Allí viajó justo después del desafío en el Himalaya del Chang Tang, por lo que, nos adelanta, la quinta temporada de “Desafío Extremo” será “increíble”.