Un nuevo estudio muestra que los niveles de beta amiloide, sustancia producida por la actividad cerebral, podrían ser un marcador de la enfermedad de Alzheimer, ya que se ha visto que normalmente aumentan de día y se reducen de noche.
Además, los investigadores de la Facultad de medicina de la Universidad de Washington, afirman que el cuerpo parece usar el tiempo de descanso del cerebro para eliminar sustancias relacionadas con la enfermedad y cuentan que aunque el hallazgo es preliminar, podría sugerir una posible relación entre la privación del sueño y el riesgo de desarrollar la enfermedad que deteriora el cerebro.
Según los científicos del estudio, en las personas sanas, los niveles de beta amiloidea se reducen a su punto más bajo unas seis horas tras el sueño, y vuelven a su punto más alto seis horas tras el máximo de vigilia.
Bateman y otros investigadores hallaron también que éste es un patrón que se da más en personas jóvenes y saludables, y no tanto en personas mayores que sufrían periodos de sueño más cortos o con más interrupciones.