En elLV CONGRESO DE LA SEGG, Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, se estudió la necesidad de formación de titulados en geriatría, porque faltan profesionales para atender el envejecimiento, José Antonio López Trigo, actual presidente de la SEGG, dijo que es difícil cubrir la necesidad de geríatras (médicos especializados en geriatría) porque hay un 11% menos de MIR.
Según artículo de Divulgación Dinámica, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), los ancianos de España no reciben una asistencia correcta ya que no siempre están atendidos por profesionales especializados en geriatría. Los datos de la SEGG señalan que España cuenta con entre 350 y 400 geriatras trabajando en la red pública sanitaria, y sería necesario doblar su número hasta los 800 para que las personas con más de 85 años reciban la asistencia adecuada.
Los miembros de la SEGG indican que existen grandes desigualdades en la implantación de la geriatría en la red sanitaria de las Comunidades Autónomas. Según José Antonio Serra, vicepresidente de la SEGG, Andalucía no tiene geriatras en sus centros públicos, así como en el País Vasco. Este hecho no sucede en las comunidades de Madrid y Catalunya, donde los ancianos tienen una mejor atención.
La implantación de profesionales especializados de la gerontología es fundamental ya que los adultos mayores no sólo sufren enfermedades comunes a todos, sino que muchos también son propensos a enfermedades mentales como la depresión y la demencia. Una valoración geriátrica no sólo contempla el estado físico del paciente, sino también su estado mental, cognitivo, psicológico y social, factores que ayudan a mejorar la calidad de vida del paciente, esto se realiza por un gerontólogo.
Las TIC están ayudando mucho en este proceso, La Cruz Roja y otras entidades dispone de un servicio de asistencia remota al domicilio, a los ancianos que viven solos, de modo que si tienen algún problema, disponen de un pulsador que avisaría de la emergencia y los profesionales activarían un sistema de manos libres para hablar con el anciano y ver si necesita socorro físico. Además, son una herramienta terapéutica usada en geriatría.