El proyecto permite que las personas con discapacidad intelectual puedan ejercer su derecho a la información a través de la lectura fácil
Imagina que una mañana abres el periódico o te conectas a internet y al leer te parece que todo está escrito en un lenguaje que desconoces. Puedes percibir las palabras, sabes pronunciarlas pero cuando intentar entenderlas algo se desdibuja en tu cabeza. ¿No notarías el aliento del aislamiento? Así se sienten cada día muchas de las personas con discapacidad intelectual que intentan descifrar la actualidad.
Para concienciar y también para luchar contra esta injusticia, Plena Inclusión Madrid, la Federación de organizaciones a favor de personas con discapacidad intelectual de Madrid, ha puesto en marcha un servicio profesional de adaptación de textos a través de la lectura fácil. Este método permite que personas con problemas de comprensión lectora puedan disfrutar de una forma real su derecho a la información.
El servicio bautizado como “Adapta”, en el que Fundación Montemadrid ha colaborado económicamente a través de nuestra Convocatoria de Acción Social, ha construido una red de lectura fácil con profesionales expertos en la adaptación de textos de Inclusion Europe y personas con discapacidad formadas en las técnicas, lo que permite verificar que los textos adaptados son accesibles a la comprensión lectora de todos y supone además un nuevo empuje para el empleo de personas con discapacidad intelectual o de desarrollo, sin los cuales las adaptaciones de la información no podrían llevarse a cabo.
Por el momento, Adapta cuenta con seis servicios de validación de textos, ubicados en entidades miembro de Plena Inclusión Madrid: Adisli, Apama, Aspacén, Fundación Ademo, Fundación Aprocor y Grupo Amás, y según las previsiones contará con otros seis a final de año, gracias a la formación que en el marco del proyecto se está ofreciendo a otras organizaciones del movimiento asociativo de la discapacidad intelectual en Madrid.
Un ambicioso y necesario proyecto que supondrá un “impulso definitivo a la lectura fácil, una solución de accesibilidad que debe colocarse al mismo nivel que las rampas, ascensores o el braille, porque, como ellos, es una solución que hace posible que personas con problemas de comprensión lectora puedan acceder a la información”, en palabras de Adapta Madrid.